Quizá la subida a la colina de Goodwood no sea tanto una competición como una exhibición, pero nunca podemos hacer desprecio a ver unos cuantos coches, la mayoría muy exclusivos, rodando a fondo. Menos aún si se trata de la primera aparición ante el gran público, cronómetro en mano, de bestias como el McLaren P1 LM.
Una de las previstas cinco unidades que se producirán del superdeportivo híbrido de 1.000 CV se enfrentó a la carretera de Goodwood con Kenny Brack a los mandos y se alzó como el coche de producción más rápido de todos los participantes en esta edición 2016 del Festival of Speed. Pero lo mejor es que veas cómo baila y chilla la furia de Woking.
Con un tiempo de 47,07 segundos y un sonido estremecedor, el LM se metió 2,20 segundos por delante del segundo coche más rápido, el Nissan GT-R Nismo 2017, y 3,37 más rápido que el tercero, el Noble M600. Una diferencia notable en una pista tan corta.
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