Siempre me he preguntado como es posible que en una autopista, en la que no hay cruces, ni semáforos ni nada que te haga detenerte se puedan producir atascos de esos de estar parado más tiempo del que quisieras.
Y no me estoy refiriendo a esos atascos producidos por algún accidente, me refiero a esos en los que de repente, no ha pasado nada y todo vuelve a fluir con total normalidad. Pues en este vídeo se puede ver cual es la causa.
En un circuito circular se pidió a 22 conductores que llevasen sus coches a 30 km/h, manteniendo la distancia con el vehículo que le precede. A las pocas vueltas, ya se puede ver como llega el temido atasco, que simplemente se produce por el fallo humano. Un curioso estudio de la Universidad de Nagoya.
Vía | Pixel y Dixel
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