Cuando te gastas cerca de 100.000 euros en un coche que llevas años esperando, lo mínimo que esperas es un trato digno por parte de la marca. Y sobre todo, que no se lo tenga que llevar la grúa tras recorrer menos de 60 km.
Fue precisamente la experiencia que tuvo el dueño de una Tesla Cybertruck al sacarla del concesionario. A lo que se añade que, cuando se puso en contacto con Tesla, le dijeron que su avería no la cubría la garantía.
También se la entregaron sucia y a media carga. Al final Tesla recogió cable
El miércoles de esta semana, este a priori feliz propietario fue a recoger su Tesla Cybertruck. Optó por la más cara y potente disponible, que es la denominada Cyberbeast: sus tres motores rinden en conjunto 845 CV y su precio arranca en 99.990 dólares.
Lo hizo en el centro de Pensacola (Florida) y en la entrega ya comenzaron los problemas: su Cybertruck que "estaba por allí", le indicaron, estaba "muy sucia por fuera". Además, se la entregaron a media carga: la pantalla rezaba que la batería estaba al 47 % de su capacidad. "Nunca he comprado un coche nuevo sin el depósito lleno de gasolina. ¿Qué es Tesla?".
Optó por cargarla de camino a su casa en Destin, otra ciudad de Florida a una hora de camino, más o menos. Cuando llegó a la estación Supercharger de Crestview, para lo que recorrió unos escuetos 58 km, empezaron los problemas.
La Cybertruck, enchufada al cargador, comenzó a soltar líquido refrigerante por la trasera. Lo demuestra con una foto, en la que vemos el líquido derramado sobre el asfalto. Con un enfado ya considerable llamó al servicio técnico. Lo primero que le contestaron es que las fugas de refrigerante no estaban cubiertas por la garantía.
Ante semejante respuesta, montó en cólera: "tras unas selectas palabras" propiciadas a la persona que lo atendía, le confirmaron el envío de una grúa para trasladarla al taller.
Todo esto lo narra en un hilo del foro de propietarios de la Cybertruck, que título primeramente como "35 miles until Cybercrap" (algo así como "Hasta 56 km de Cyberbasura" si lo traducimos al castellano). Gracias a las respuestas sabemos que era una unidad que apenas había recorrido 24 km cuando la recogió. También que en el display no mostró aviso alguno de sobrecalentamiento o avería.
El caso es que Tesla finalmente mandó la grúa, pero quedaba por saber si arreglaría el problema sin que este cliente tuviera que pagar el arreglo. Por lo que parece, las palabras que tuvo con el servicio técnico, o quizá que se quejara públicamente, surtió efecto.
En su siguiente mensaje, un día después, el dueño de esta Cyberbeast explica que finalmente arreglaron su pick-up. Se entiende que sin coste alguno ya que ni se queja ni publica factura alguna, a diferencia de otro enfadadísimo propietario al que le cobraron más de 100 dólares por arreglar el volante de su Model Y recién sacado del concesionario: se le descolgó en plena marcha.
Es más, lo que al principio fueron dardos terminaron por ser halagos: "Excelente servicio hoy. Estoy encantado y la pick-up es increíble". Pasó de Cybercrap a "todofenomenal" en pocas horas, como le recuerda otro usuario del foro. "Sí, una montaña rusa de emociones". Sea como fuere, tuvo que enfadarse y mucho para que Tesla se hiciera cargo de una avería de un coche recién estrenado, con menos de 60 km recorridos, sin cobrarle por ello.
No es la primera vez. El mencionado dueño del Model Y al que se le salió el volante circulando por la autovía, y que derivó en una llamada a revisión masiva posterior con más 120.000 coches pasando por el taller, tuvo que montar en cólera para que Tesla le devolviera el importe del arreglo.
Su caso lo hizo público en redes sociales, lo que se viralizó. Y amenazó a Tesla con devolver su SUV eléctrico. Al final la de Palo Alto optó no sólo por devolverle el dinero de la reparación, sino también por entregarle otra unidad nueva. En el caso del dueño de la Cybertruck, quizá también fue determinante que contara su caso en este foro de propietarios.
Tampoco ha sido el primer propietario de una Cybertruck que ha denunciado problemas. Otro caso reciente, aunque con más kilometraje y tras dos meses y medio de tenerla en su manos, se topó con que el display se quedó en negro sin reaccionar. Lo único diferente que había hecho respecto a otras veces fue meterla en un túnel de lavado.
Al final bastó con reiniciar el sistema, para lo que el software necesitó cinco horas. Pero lo cierto es que Tesla advierte en el manual de la Cybertruck que los daños provocados en un túnel de lavado no van cubiertos por la garantía.
Igualmente deja muy claro que cualquier problema o avería derivada de no seguir al pie de la letra el manual de mantenimiento nunca está cubierto. Entre otras cosas advierte que su carrocería inoxidable, y antibalas, se estropea con excrementos de pájaro si tardamos mucho en lavarla. Y hacerlo también exige una serie de precauciones, incluyendo no hacerlo al sol o incidir demasiado tiempo y demasiado cerca con la manguera.