Las Apple Vision Pro se lanzaron el pasado viernes y en sólo tres días ya las tenemos inundando las redes sociales de vídeos y fotos con gente utilizándolas en todo tipo de situaciones. De hecho, hasta conduciendo.
Dos han sido los vídeos que han circulado con conductores con estas gafas de "realidad mixta". En ambos casos con coches de Tesla: una Tesla Cybertruck y un Tesla Model Y. Nada mejor para hacer ruido en redes que juntar el ultimísimo gadget de moda con la tecnológica y popular marca de Elon Musk.
Pero ni a Tesla ni a Apple les debe hacer gracia que haya quien firme semejante imprudencia con ambos en la ecuación: nunca puede ser buena publicidad.
Con un Tesla Model Y sin las manos en el volante ni los ojos en la carretera
Andando por la calle o por un centro comercial con las Apple Vision Pro, sentados en un restaurante en compañía pero no tanto o en el metro escribiendo en un teclado que sólo ve él. Surrealistas y distópicas situaciones como estas se han viralizado desde que las Apple Vision Pro han llegado a los primeros usuarios. Sí, esto también lo predijeron Los Simpsons.
Bromas aparte, los hay que han optado por la nefasta idea de circular con estas gafas puestas: dos en un coche y otro en un monopatín por un carril bici. Algo que, obviamente, no recomienda Apple: "Nunca utilice las Apple Vision Pro mientras conduce un vehículo en movimiento, una bicicleta, maquinaria pesada o en cualquier otra situación que requiera atención a la seguridad", se indica en el manual de usuario.
Este nuevo gadget de Apple, una suerte de gafas VR y que arrancan en 3.499 dólares, las denomina la marca de la manzanita como "spatial computer", que se traduce como "computadora espacial". Básicamente cuando uno se pone estas gafas ve contenido digital proyectado en un entorno real. Es decir la realidad se adereza con realidad aumentada.
Cuando ser viral no renta tanto y te acaba pillando la policía. En los dos vídeos que han circulado por redes con dos modelos Tesla el cuadro es el mismo: el conductor lleva las Apple Vision Pro mientras circula sin llevar las manos sobre el volante y tecleando en el aire, se entiende que interactuando con elementos de realidad aumentada.
Aquí entra en juego el Autopilot de Tesla, que permite circular de forma semiautónoma al coche. Pero este sistema, aún siendo el FSD, obliga a llevar las manos en el volante. De ahí que ambos vídeos sean cortos. De hecho, en el del Tesla Model Y tiene varios cortes y apenas vemos cuatro segundos seguidos de esa guisa: el sistema avisa al conductor que debe tomar el control si pasados unos segundos no detecta que tenemos las manos al volante.
Otra pregunta que cabe hacerse es si las gafas estaban activadas o no. Pero debían estarlo: para poder ver a través de ellas tienen que estar activas o se ve en estupendo negro. Sea como fuere, no es para nada buena idea circular con ellas puestas. Por razones obvias.
Primero porque la realidad no se ve igual que percibida por el ojo humano: la captan a través de cámaras. Esto afecta a la visión periférica o la percepción de profundidad: en un coche a alta velocidad o bien circulando en ciudad con peatones y usuarios vulnerables, puede ser fatal. Si lo es en cualquier coche, ya no digamos en una Tesla Cybertruck con su polémica e indeformable carrocería.
Además, si vamos en movimiento, el desenfoque no puede evitarse. Por no mencionar que el peso de las gafas puede aumentar el riesgo de latigazo cervical en un choque frontal: pesan unos 600 gr.
En definitiva, la lógica nunca puede dictar conducir con estas gafas puestas, por mucho que quieras tu pedacito de fama efímera en redes. El resultado ha sido el esperado: al del Model Y le acaba parando la policía.
Afortunadamente ninguno de los dos casos acabó en accidente, pero por desgracia seguro que no son los únicos casos con los que nos vamos a topar con las Apple Vision Pro ya en el mercado. El futuro ha llegado, pero la estupidez humana siempre va por delante.