Por si no tuviéramos suficientes, Apple quiere convertir el parabrisas de los coches en una gran pantalla con realidad aumentada
Con su coche autónomo aún en proyecto, Apple acaba de presentar una sorprendente solicitud ante la Oficina de Patentes y Marcas de EEUU (USPTO) que detalla un parabrisas con realidad aumentada integrada que, de llegar a hacerse realidad, sería una hazaña tecnológica sin precedentes.
A priori no sería sencillo ni barato, pues a diferencia de lo que sucede con los básicos Head-Up-Display (HUD) o con los sistemas de realidad aumentada para navegación (MBUX) como los de Mercedes-Benz, en el parabrisas de Apple las imágenes digitales y la información del entorno se irían superponiendo a las imágenes reales en todo el parabrisas.
Cómo pretende Apple desarrollar su parabrisas con realidad aumentada
Salvo contadas excepciones, que los coches nuevos equipan cada vez más pantallas y de mayor tamaño en detrimento de los botones físicos y otros mandos, pese a la peligrosidad que esto puede suponer, no es un secreto. Sin embargo el futuro del automóvil y los avances en asistencias a la conducción pasan irremediablemente por la digitalización y un despliegue tecnológico importante.
Ahora Apple quiere dar un paso más hacia ese futuro planteando este parabrisas con realidad aumentada, pese a que según la información que se detalla en la patente, el gigante tecnológico lleva desde 2015 investigando las aplicaciones de la realidad aumentada en automóviles y otras tecnologías relacionadas con este novedoso parabrisas.
No es de extrañar, pues convertir todo el parabrisas en una gran pantalla con tecnología de realidad aumentada integrada, bien implementada, es una tarea muy compleja y muy diferente a la de incorporar sistemas como los HUD que llevan décadas entre nosotros.
Estos sistemas se limitan a proyectar parámetros sencillos (como la velocidad a la que vamos circulando) en una pequeña pantalla transparente situada delante del parabrisas de tal forma que no tengamos que quitar la vista de la carretera para consultarla. Sin embargo, la realidad aumentada integrada implica la superposición de imágenes virtuales proyectadas sobre las imágenes reales que vemos a través del cristal en tiempo real.
Así, por ejemplo, con el parabrisas de Apple cada señal de límite de velocidad se convertiría al momento en uno de esos escáneres de radar que muestran la velocidad a la que vas comparada con el límite de la vía. O las indicaciones del navegador en tiempo real harían que fuera casi imposible que nos equivocásemos de salida en la autopista.
La patente también explora ideas más extravagantes como por ejemplo que el sistema de realidad aumentada “podría mostrar badenes simulados en el entorno si se detecta que el conductor va demasiado rápido” para que este aminore la velocidad. Para completar el efecto, el sistema de realidad aumentada “podría trabajar con la suspensión activa del coche para crear la sensación de pasar por encima de badenes o bandas rugosas”.
Luces y sombras de la tecnología de realidad aumentada de Apple
Quien se haya puesto alguna vez unas gafas o un casco con realidad aumentada se podrá imaginar que las posibilidades del parabrisas de Apple son infinitas: casi como si estuviéramos en un simulador o jugando a un videojuego a escala 1:1 en lugar de en un coche, aunque en este caso ‘si se nos congela’ la pantalla, probablemente tendríamos un grave problema.
En este vídeo se puede ver cómo funciona la tecnología de realidad aumentada que Mercedes-Benz ya implementa en algunos de sus modelos más recientes, aunque en lugar de integrarse en una parte del parabrisas esta sólo se aplica a las pantallas de información y entretenimiento, y sólo cuando la navegación está activada.
Integrar la compleja tecnología de realidad aumentada de Apple en un parabrisas completo para que funcione correctamente plantea varios desafíos como por ejemplo el paralaje: los conductores de estaturas diferentes verán los mismos objetos a través de distintas partes del mismo parabrisas, lo que dificulta determinar en qué parte del parabrisas se deberán proyectar los elementos.
Además, como sugiere la patente, el sistema de realidad aumentada de Apple se basaría en una serie de complejos sensores “para recopilar información sobre el entorno”. Esto puede abarcar desde cámaras de luz visible a varios tipos de cámaras de infrarrojos, así como dispositivos de escaneo ultrasónicos para construir una imagen tridimensional fidedigna del entorno del coche.
También se menciona “el uso de dispositivos de posicionamiento geográfico y de radar” como algunas de las claves para el funcionamiento de su parabrisas. Toso ese despliegue tecnológico ni es barato ni es sencillo de mantener.
Aunque la patente de Apple promete un emocionante avance en la futura experiencia de conducción con su parabrisas de realidad aumentada, los detalles técnicos y prácticos de su funcionamiento aún suscitan numerosas incógnitas. Mientras proyectar información en una porción del parabrisas podría ser factible, transformar toda la superficie en una pantalla de realidad aumentada funcional plantea desafíos técnicos significativos.
Las posibles técnicas de proyección o el uso de LCD podrían acabar desplegándose, pero llevar esta visión a la escala de un automóvil requeriría una hazaña tecnológica considerable. A medida que los vehículos continúan evolucionando, la competencia por revolucionar la interfaz de usuario se intensificará.
Así, además de la Inteligencia Artificial, la realidad aumentada podría ser sólo una característica más de la lista de innovaciones que nos espera en el futuro.
Foto apertura: Getty Images