Ya sabíamos que el Renault Captur iba a venir renovado al Salón de Ginebra y estuvimos contando algunos detalles acerca de sus cambios previamente. Desde su lanzamiento en 2013 se ha convertido rápidamente en uno de los coches más exitosos de la gama Renaul, así que simplemente se ha actualizado para mantenerse en la línea estética del resto de la familia francesa.
Nos faltaban saber algunas cosas como por ejemplo qué cambios se iban a producir en el interior del habitáculo y salvo alguna novedad como el techo panorámico de cristal fijo no podemos destacar grandes cambios más allá de un equipamiento más completo o detalles estéticos. Ligeros retoques que convierten al líder de los B-SUV en una aún mejor apuesta comercial.
Pocos cambios, pero acertados
Habiendo superado las en sus cuatro primeros años de vida a superventas como el Nissan Juke y el Peugeot 2008, el Captur se planta en 2017 con un exterior más próximo a otros modelos de la marca incorporando la luz de día en forma de C, distintos materiales para el interior y más opciones de personalización con seis packs para el interior y tres para el exterior.
La pintura bitono empleada hasta ahora se complementa con la adición de tres nuevos colores disponibles que se pueden combinar en un total de 30 formas diferentes. Para el interior ahora se puede optar por seis acabados diferentes y todos con materiales de mejor calidad.