Después de ser proclamado Presiden de los Estados Unidos de América, hicimos un repaso sobre los coches más espectaculares que Donald Trump debería dejar aparcados. Entre Lamborghinis y Rolls-Royce hay otro coche de postín, pero que no se va a quedar en el garaje porque de hecho ya no pertenece a Trump, sino que ahora se pone a la venta para aprovechar el tirón y sacar unos dólares extra.
Se trata de todo un Ferrari F430 que fue comprado nuevo en el año 2007 por el mismísimo Donald John Trump, quien lo tuvo hasta el año 2011 cuando lo vendió con sólo 3.862 km. Desde entonces, el supercoche italiano de 490 CV ha permanecido en manos del propietario que ahora, con Trump recién instalado en la Casa Blanca, busca hacer su pequeño agosto.
Mínimo de 250.000 dólares para este "coche presidencial"
La combinación de pintura Rosso Corsa, el interior en beige y la mecánica del 4.3 litros V8 a 90º se han mantenido en riguroso estado de revista pese a cumplir una década este 2017. En su odómetro sólo hay 9.656 km.
Será subastado el 1 de abril en AuctionsAmerica, y se estima que su precio ronde la horquilla entre 250.000 y 350.000 dólares. A cambio, aparte de un deportivo de pura cepa el ganador se llevará toda la documentación original, incluyendo aquella en la que figura el nombre del ahora Presidente Trump.
Precisamente por esto, ni siquiera la propia casa de subastas sabe qué puede ocurrir con el precio, pues es la primera vez que sale a subasta un superdeportivo de estas características que haya sido propiedad de un Presidente de los Estados Unidos. Vamos, que la cifra por la que se adjudique puede ser totalmente desorbitada.
En Motorpasión | A la venta la limusina que Trump encargó a Cadillac en los 80 (imagina sus interiores)