En plena era de la electrificación lo normal era pensar que los superdeportivos de la vieja escuela pasarían a mejor vida. Pero Ferrari se ha desmarcado estrenando en pleno 2024 un cavallino con la receta de los primeros coches de la marca: su corazón es un V12 atmosférico. Pasión pura.
No es la única: los motores V12 siguen teniendo su hueco en nuevos lanzamientos. Aunque la estrategia va por barrios: las hay que los mantienen pero aderezados con propulsores eléctricos y otras mantienen perfil purista. Sea como fuere, estos brutales motores son siempre bienvenidos, aunque sigan siendo patrimonio exclusivo de marcas de altos vuelos.
A la estela del Ferrari 12Cilindri: los V12 que llegan y llegarán
La enmienda Ferrari va a permitir que marcas de bajo volumen sigan estrenando coches de combustión en Europa cuando llegue el apagón a lo eléctrico, que será, en teoría, en 2035. Básicamente les salva el uso de los e-fuels. Y marcas como la propia Ferrari, Aston Martin o Lamborghini lo están aprovechando manteniendo en la ecuación a los V12.
Así, el Ferrari 12Cilindri es toda una declaración de intenciones y la piedra angular de remar contracorriente con la pasión sobre la razón. Este gran turismo de escultural impronta equipa la nueva versión del V12 de la casa, con 6.5 litros, 830 CV y 678 Nm, que se estira hasta las 9.500 rpm. No se apoya en electrificación alguna y tampoco va turboalimentado. Ferrari ha puesto tanto mimo a este V12 que hasta puedes escoger el color de sus cilindros.
Pero este 12Cilindri no será el único V12 puro estrenado este 2024: Aston Martin acaba de desvelar su nuevo bloque de 12 cilindros en uve: ha presentado antes el motor que el coche que lo llevará. Entregará 835 CV y rendirá nada menos que 1.000 Nm. A diferencia del cavallino en su caso es biturbo.
Presumiblemente el Aston Martin que estrene este propulsor será el nuevo Vanquish, aunque la marca se limita a mencionar que lo equipara "un nuevo modelo insignia". Con este estreno la británica también deja claro que no va a dejar morir los V12 pese a que el último de los DBS lo lleve: el poderoso Ultimate de 770 CV. "El amanecer de una nueva era V12", ha sido el reclamo de este nuevo propulsor.
En la nueva era de Lamborghini, hasta la llegada del Urus que es V8 con motor delantero, la italiana articulaba su gama en un V12 y un V10. Y pese a que se va a rendir a la electrificación en sus próximos lanzamientos, no lo va a hacer renunciando al propulsor que por tradición da vida a su coche de referencia.
Y es que al Lamborghini Aventador le sucede el brutal Lamborghini Revuelto. Sí, es híbrido enchufable, pero su corazón es un V12 de 6.5 litros. Se apoya en tres motores eléctricos para rendir nada menos que 1.015 CV y 1.425 Nm. En parte hace trampa con la electrificación, pero su bloque V12 es quien aporta mayor entrega al conjunto: 825 CV. Y sigue siendo un V12 atmosférico.
Además de esta santísima trinidad de marcas tradicionales, hay firmas de superdeportivos de volumen aún más bajo que también están contribuyendo a perpetuar los V12. Por ejemplo la danesa Zenvo, que el año pasado estrenó el Aurora. Este hiperdeportivo es híbrido, pero con un V12 biturbo presente de nada menos que 1.250 CV. Suma fuerzas con un motor eléctrico de 600 CV para rendir 1.850 CV totales.
Y una vieja conocida, Pagani, también da vida a uno de sus últimos retoños con un V12: el Pagani Utopia. Esta quinta esencia del purismo montará un V12 de 6.0 litros biturbo de 864 CV y unos generosos 1.100 Nm que puede asociarse a un cambio completamente manual. No hay electrificación en su menú. Tampoco la hay en el recién llegado Pagani Huayra R EVO, igualmente con un V12 de aspiración natural y 900 CV.
Es más, hasta hay modelos SUV que se suman a esta fiesta con la nostalgia por bandera: el nuevo Rolls-Royce Cullinan va a mantener el V12 bajo el capó a demanda de los propios clientes de la marca. Acaba de desvelar sus credenciales.
En definitiva y pese a quien ya hay quien apuesta por los hiperdeportivos eléctricos puros que superan los 1.000 CV y hasta los 2.000 CV (hola, Aspark Owl) el reducto de los gasolina de altos vuelos sigue teniendo muy presentes los V12. Y que así sea largos años pese a que hablamos de coches con los que la mayoría de los mortales sólo podemos soñar.