Si no fuese por Internet, nunca nos enteraríamos de hechos como los que os voy a contar. Una noche de noviembre, un camionero de 41 años se tomó unas copichuelas con su vástago de 13 años, como una especie de acto paterno-filial en la que hubo abundante alcohol por medio. El problema vino cuando el padre, más pedo que Alfredo, se dio cuenta que no podía conducir, y delegó la tarea en su hijo, que tambíen iba bien puesto.
Condujo cierta distancia hasta quedarse embarrado en un parque. Un agente de policía que pasaba por allí se encontró con un camión con dificultades, y cuando vio al conductor, debió flipar. Cuando vio al acompañante, flipó más, y viendo la cantidad de cervezas y botellas consumidas, ya debió ser la leche.
Evidentemente, hay cargos tanto para el padre como para el hijo, aunque el primero será el que seguramente se va a llevar el mayor paquete. Esto ocurrió en Flint, Michigan (Estados Unidos), aunque seguramente eso ya lo habías deducido antes. ¡No sólo los famosos hacen estas tonterías! La diferencia está en la importancia mediática…
Fuente | Foxnews
Fotografía | Too Much Alcohol… por YvesM (Flickr)
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