No es la primera vez ni la última que alguien acaba en la entrada de una auopista de peaje por equivocación. Por mucho que fastidie, no queda otra que acceder y pasar por caja, pero una conductora no pensó lo mismo cuando se vio ante las barreras de acceso a la R-3.
Con el objetivo de no pagar el peaje, esta mujer dio la vuelta con su coche y optó por deshacer el camino recorrido hasta allí. En total, circuló siete kilómetros en dirección contraria hasta que la Guardia Civil consiguió detenerla.
"Manifiesto desprecio por la vida de los demás"
El personal de la autopista radial se encargó de llamar a la Guardia Civil para avisar de que un coche había realizado un cambio de sentido al llegar a las barreras del peaje, dirigiéndose hacia Arganda del Rey, pero en sentido M-40.
Tras recorrer siete kilómetros, una patrulla de la Agrupación de Tráfico detuvo a la kamikaze. Para sorpresa de los agentes, la conductora aseguró que era plenamente consciente de lo que estaba haciendo y que había realizado la maniobra para no pasar por el peaje.
Como era de esperar, acabó detenida como “presunta autora de un delito de conducción temeraria con manifiesto desprecio por la vida de los demás”, dado que puso en riesgo su propia vida y la del resto de usuarios de la vía de una forma totalmente deliberada.
La kamikaze dio negativo en los controles de alcohol y drogas y quedó detenida a disposición judicial por no tener domicilio legal en España. Según el artículo 380 del Código Penal, el delito de conducción temeraria está castigado con penas de prisión de seis meses a dos años.
Sin embargo, en este caso hay que tener en cuenta el agravante de haberse llevado a cabo con “manifiesto desprecio por la vida de los demás”, por lo que puede suponer pena de prisión de 2 a 5 años, multa de 12 a 24 meses y privación del derecho a conducir vehículos a motor por entre 6 y 10 años.
Fuera sorpresas en carretera: contrata el Seguro de Coche Allianz y ahorra hasta un 40%. Tendrás asistencia sin límites, acceso a la red de Talleres Excelentes con vehículo de sustitución, recogida y entrega a domicilio, peritación digital sin esperas, limpieza y revisión de los puntos del coche y reducción de la franquicia.
Como mucho, el peaje de la autopista R-3 puede costar 3,30 euros, pero la kamikaze dio la vuelta antes de pasar las barreras de Arganda, por lo que el precio máximo en su caso habría sido de 2,35 euros. Desde luego, ahora lo va a pagar muchísimo más caro. Por suerte, no hay que lamentar ningún daño.