¿Qué pasa si equipamos un Fiat 500 con un motor V8 de Ferrari? Si el estudio de diseño Lazzarini consigue el casi medio millón de euros que necesita para desarrollar el proyecto, quizá en un tiempo sepamos más sobre el Lazzarini Design 550 Italia, un prototipo con el que se quiere aunar dos rasgos distintivos de la automoción italiana: la potencia de Ferrari y el encanto de Fiat. Todo queda en casa.
El motor que podría montar esta curiosa combinación es el V8 de 4,5 litros propio del Ferrari 458 Italia, pero dejándole la potencia en 550 CV frente a los 570 CV del presunto gafe de Maranello (es broma, son todo serendipias), quizá para evitar que vuele más de la cuenta. Que tiemble el mundo que allá va, con el motor ocupando toda la parte trasera del vehículo. Se recomienda el uso de tapones antirruido.
También van a ser necesarios unos cuantos retoques en chasis y carrocería. El modelo pesará casi 1.000 kilos, ganará 200 milímetros en la vía delantera y 300 en la trasera, y aumentará también 300 milímetros en la batalla. En el techo, destaca la toma de aire necesaria para refrigerar el propulsor, y por encima de todo llama la atención el kit aerodinámico con ese alerón tan dragster que también puede servir para colgarse del bolso la versión más bestia del multiversionado Fiat 500.
Vía | GT Spirit
