Aunque parezca un coche de carreras -y lo es-, listo para asaltar cualquier circuito, en realidad este Porsche 911 GT1 (993) es apto para la carretera, si bien es probable que no sea el mejor coche para el día a día. Fabricado en 1997 para el equipo de competición Julius Racing, ha participado en múltiples carreras, incluída la edición de las 24 Horas de Le Mans del mismo año.
Ahora, esta joyita de la historia del automovilismo está a la venta en el concesionario Mark Donaldson, en Hampshire, Inglaterra, aunque estará al alcance de muy pocos. Tras sus años de carreras fue a parar a Reino Unido, donde reside actualmente, y a principios del año pasado fue transformado por Riverside Performance Engineering para poder usarse en vías públicas.
Entre las modificaciones necesarias para la carretera destacan unos amortiguadores Bilstein reajustados, muelles más blandos, nueva electrónica (MoTec), turbocompresores reconstruidos, un escape apto para calle con catalizador, instalación de un freno de mano, llantas BBS con neumáticos Michelin Pilot Sport o un nuevo sistema de frenos con discos de acero y pinzas específicas, que sustituye a los originales de carbono.
Aún así conserva un interior digno de Le Mans, aligerado, con jaula antivuelco, volante de piel vuelta, extintor, arneses y asientos Recaro de competición (dos, en lugar del único asiento original), entre otras cosas. ¡Quién pudiera permitírselo! ¿verdad?