A pesar de la caída que Valentino Rossi sufrió el pasado domingo en Motegi, su enorme ventaja en la clasificación general le ha dejado prácticamente sin oposición en la lucha por el título, y sólo Max Biaggi se mantiene como única y lejana amenaza capaz de retrasar la celebración del piloto de Yamaha.
Hay varias combinaciones que impedirían al líder del Mundial acabar festejando en Malasia el que sería su séptimo título. Y todas pasan porque Max Biaggi sume en Sepang 12 puntos más, como mínimo, que su compatriota.
Así, por ejemplo, si el romano venciera la carrera, Rossi debería ser quinto o peor; si Biaggi fuera segundo, Rossi no podría terminar octavo o mejor. El piloto de Yamaha tendría suficiente con sumar un punto si Biaggi termina cuarto. Una peor posición del piloto de Repsol Honda otorgaría el campeonato a Rossi, fuera cual fuera el resultado del Doctor.
Aunque matemáticamente Biaggi podría aún ser campeón, sus esfuerzos se centran en intentar asegurar la segunda posición. Ha despegado en las últimas carreras, con un tercer puesto en la República Checa y una segunda posición el pasado domingo. Dos podios que le han permitido cobrar una ventaja de 16 puntos sobre Colin Edwards, y que confía en administrar para sellar el subcampeonato.
Con su actuación en el GP de Japon, Biaggi está a un podio de igualar la marca que en este apartado ostentan Mike Hailwood y Valentino Rossi, con 111, y compartiría así la cuarta plaza en el ránking de todos los tiempos. Atendiendo a las últimas ediciones del GP de Malasia, las posibilidades de que Biaggi termine en las plazas de honor son muchas, ya que ha subido al cajón las tres últimas temporadas, con una victoria incluida, en 2002.
Vía | MotoGP