El pasado 24 de marzo salía de la fábrica española de Figueruelas, Zaragoza, el último Opel Meriva tras 14 años en el mercado. Pero esta planta no se va a quedar sin trabajo ni mucho menos. De momento ya va a comenzar la fabricación de la sexta generación del Opel Corsa y la del nuevo Crossland X.
El Crossland X es el segundo miembro de la nueva gama X de Opel tras el Opel Mokka y es el primer vehículo en el que se comparte tecnología en la nueva era entre Opel y PSA. El fabricante alemán ha celebrado oficialmente el inicio de la producción y su consejero delegado, Karl-Thomas Neumann, se ha llevado de paseo los 130 CV de este compacto.
Una inversión de más de 250 millones de euros
Neumann ha conducido fuera de la línea de producción un modelo de color blanco con techo negro y motor de gasolina 1.2 turbo de 130 CV perteneciente a la nueva generación de motores de 3 cilindros, destinado al mercado alemán.
"Tiene el ADN adecuado para seguir los pasos de nuestro Mokka X, todo un superventas en el segmento de los SUV sub-compactos. El hecho de que los dos modelos se fabriquen en Zaragoza subraya la importancia de la planta para nuestra ofensiva de producto”.
El Crossland X es el primer resultado visible de la cooperación con PSA que se inició en 2012 y ha supuesto una inversión inicial superior a 250 millones de euros en la fábrica zaragozana. El trabajo en equipo de Opel y PSA también se verá reflejado en la sexta generación del Opel Corsa, que se que se basará, definitivamente, en una arquitectura de PSA: con la plataforma del Peugeot 208 y el Citroën C3.
Definitivamente porque iba en un principio a seguir fabricándose con parte de la plataforma estadounidense. El Corsa, que se produce en Zaragoza desde su inauguración en 1982, saldrá de la línea de producción a finales de 2019.
Buenas noticias para la mayor planta de producción de Opel en Europa
Tras el anuncio de la compra de Opel/Vauxhall por el grupo automovilístico PSA Peugeot-Citroën, saltaron todas las alarmas en el sector automovilístico en España.
Recordemos que las tres plantas españolas (Vigo, Madrid y Zaragoza) constituyen el Polo Industrial Ibérico del Grupo PSA, donde se fabricaron 555.000 vehículos en 2016 (el 2,5% más que en 2015), y cuenta con 8.100 trabajadores. Antes de la confirmación de la compra, el ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, llamaba a la calma aludiendo a que las fábricas españolas están "bien colocadas" debido a que son las "más productivas".
Tal y como informa El Mundo, el presidente ejecutivo de Grupo PSA, Carlos Tavares, visitará la planta de Villaverde -en la que se produce el Citroën C4 Cactus- para explicar a los trabajadores el Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) que planea la empresa para la planta hasta finales de 2020.
De momento, hay buenas noticias para la fructífera fábrica de Figueruelas, que ya ha comenzado con los preparativos del lanzamiento del C3 Aircross. Está por ver si fabricará a partir de la década que viene, como preveía General Motors, la siguiente generación del Opel Adam.
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