Hace unos meses nos preguntábamos qué tramaban Mercedes-Benz y Renault en materia de berlinas y en virtud de su acuerdo suscrito en 2010. Seguimos con la mosca tras la oreja, aunque este Salón de París ha servido para poner sobre la mesa una interesante carta de cara a 2016: un motor de cuatro cilindros e inyección directa turboalimentado.
Aunque todavía no se han desvelado los detalles de los modelos que podrían beneficiarse de este motor, lo usarán indistintamente Mercedes-Benz, Nissan y Renault, y entre sus virtudes se han anunciado bajas emisiones de CO2 y ahorro de carburante, en la línea de las filosofías eco2 de la francesa y BlueEFFICIENCY de la germana.
Por otra parte, Daimler cederá a Nissan la licencia que permitirá a la nipona fabricar, a través de su filial Jatco, transmisiones automáticas diseñadas por el grupo automovilístico alemán. Las marcas beneficiadas serán tanto Nissan como Infiniti. Un paso más en la unión estratégica entre Daimler y la alianza Nissan-Renault, una unión que no ha hecho más que comenzar a andar.
En Motorpasión | ¿Qué traman Mercedes-Benz y Renault?
