A partir del 1 de enero de 2023, y según se contempla en la Ordenanza de Movilidad Sostenible de la ciudad de Madrid, los vehículos industriales ligeros de etiqueta B no podrán circular ni acceder a la Zona de Especial Protección Distrito Centro, anteriormente Madrid Central.
Pero, a menos de un mes para que entre en vigor este nuevo veto en la capital, el Ayuntamiento de Madrid ha anunciado que propondrá una moratoria de un año para este tipo de vehículos.
No es la primera vez que vemos como cambia un calendario de restricciones asociado a una ZBE. Lo que demuestra que quizá han sido demasiado ambiciosos. Por ejemplo, en Barcelona (cuya ZBE se extiende por toda la ciudad) se proyectó que en 2022 los coches de distintivo B de no residentes quedaran vetados, pero quedó finalmente en suspenso y aún no se ha aplicado.
Margen de un año para los industriales ligeros en esta ZBE
La moratoria ha sido propuesta a las puertas de 2023 por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. El edil madrileño ha señalado que pondrá sobre la mesa esta moratoria en pleno la semana que viene, concretamente el martes 20 de diciembre.
El gobierno municipal planea introducir así una nueva enmienda en la Ordenanza de Movilidad Sostenible que "modificará el apartado 2 de la Disposición transitoria tercera sobre requisitos ambientales para el acceso al distrito de Centro" con un cambio de fecha para esta restricción "hasta el 31 de diciembre de 2023".
Moratoria solo para furgonetas y camiones ligeros de etiqueta B. Según lo que dicta esta normativa, la restricción para vehículos de transporte de mercancías que operan en la ZBE del Distrito Centro es la siguiente:
- Vehículos ligeros: aquellos vehículos cuya masa máxima autorizada sea igual o inferior a 3.500 kg con distintivo B no podrán acceder desde el 1 de enero de 2023.
- Vehículos pesados: aquellos vehículos de más de 3.500 kg de sin etiqueta podrán acceder hasta el 31 de diciembre de 2022, y los vehículos con distintivo B hasta el 31 de diciembre de 2024.
Es decir que el consistorio madrileño únicamente contempla esta moratoria para los ligeros con etiqueta B, pero no para los industriales pesados sin etiqueta, que serán vetados desde el 1 de enero de 2023 en esta zona. Los pesados de distintivo B se libran de la restricción hasta 2025.
Los comerciantes no han podido renovar sus flotas. Según argumenta el Ayuntamiento de Madrid, esta moratoria atiende a las demandas de los comerciantes y empresas de transporte.
Y es que el distrito Centro, donde se circunscribe esta famosa ZBE antes Madrid Central ,es el que acoge el mayor número de empresas y locales de la capital. Concretamente hay registrados 20.318 negocios, siendo un 11,3 % del total de la ciudad (179.488).
El consistorio considera que los comerciantes y distribuidores se han topado con la imposibilidad de renovar sus flotas, señalando motivos como la crisis económica derivada de la pandemia, pero también los cuellos de botella de producción de vehículos por la crisis de los microchips o la inflación que ha disparado el precio de los vehículos.
Situaciones acaecidas posteriormente a la redacción de la Ordenanza que aprobó el anterior gobierno municipal y que ya se ha visto modificado bajo el mandato de Almeida. Así, se considera que no se puede cumplir con este calendario que establece las restricciones paulatinas al Distrito Centro.
No obstante, ha de recibir luz verde en el pleno madrileño. Y ya hemos visto caer otras propuestas, como permitir a los etiqueta C circular por Madrid Central.
¿Habrá más moratorias? De momento, la única señalada por el Ayuntamiento es esta propuesta que dará un año más de margen a los industriales ligeros de etiqueta B.
De ello se deduce que por ejemplo no habrá cambios en el calendario para el veto a los coches sin etiqueta no empadronados en Madrid, que desde el 1 de enero de 2023 no podrán circular por la M-30 (desde 2022 ya no podían hacerlo por la zona interior demarcada por esta autovía urbana).
La estrategia marcada por el actual consistorio, y definida en la reformulada Ordenanza, es convertir a todo Madrid en una ZBE, como ya ocurre en Barcelona. Y está previsto que en 2025, ningún vehículo sin etiqueta, ya sean coches, motos o vehículos de mercancías pueda circular por todo el término municipal, sin excluir a residentes.
Está por ver si a dos años visto, la medida se implanta en la fecha programada. Y es que en definitiva, y como ocurre con los comerciantes, cambiar de coche también supone un esfuerzo para las familias, no solo para empresas y comercios.
Según los últimos datos de la DGT, los coches sin etiqueta representan el 24,9 % del parque de vehículos en España: 6,16 millones del total de 24,7 millones de automóviles. Por su parte los etiqueta B y C acogen 8,06 millones (los más numerosos) y 7,99 millones. Juntos, los sin distintivo, los B y los C suponen casi el 90 % de los automóviles censados en España.