Fiat Chrysler Automobiles ha anunciado que parará durante dos semanas la producción en dos de sus factorías de Canadá, el próximo mes de abril. Según ha confirmado un portavoz de FCA a Autonews Canada, se trata de un ajuste para "alinear la producción con la demanda".
Las plantas de producción que echarán el cierre durante dos semanas cada una son la fábrica de Windsor (ciudad canadiense frente a Detroit, al otro lado del río), donde se fabrican los Chrysler Pacifica y Dodge Grand Caravan, y la factoría de Brampton, cerca de Toronto, también en Canadá.
Esta última factoría es la que produce los Chrysler 300, Dodge Charger y Dodge Challenger. Las líneas de producción estarán paradas las dos próximas semanas (1-14 de abril) en el caso de Brampton, y la segunda y tercera semana de abril en el caso de la Windsor Assembly Plant, que por cierto ya ha detenido su producción otras dos veces este año (enero y febrero) y normalmente opera tres turnos durante seis días a la semana y cuenta con unos 6.000 empleados.
Mucho stock y poca demanda
El principal problema para FCA es que los modelos que producen estas dos fábricas no están teniendo la demanda esperada y los concesionarios están acumulando demasiado stock, lo cual obliga a detener la producción para evitar males mayores.
Tanto el Chrysler Pacifica como el Dodge Grand Caravan han visto sus ventas caer notablemente en Estados Unidos durante el mes de febrero, con un 24 % en el primer caso (14.817 unidades en total) y un 27 % en el segundo (19.634 ejemplares). En Canadá, no obstante, el Pacifica lleva acumulada una caída del 54 % en los dos primeros meses de 2019, y el Grand Caravan un 20 %.
Por su parte, durante el mes de febrero en Estados Unidos las ventas de Chrysler 300 se han reducido un 32 % (4.586 unidades), las del Challenger han bajado en un 28 % (6.869 unidades) y las del Charger se han resentido un 8 % (11.757 unidades).