Las urnas se abren de nuevo este domingo 9 de junio para votar en las elecciones al Parlamento Europeo para la legislatura 2024-2029, en la que España contará con 61 escaños a repartir entre los candidatos de las fuerzas políticas.
Repasamos las principales propuestas de los cinco principales partidos políticos (ordenados por orden alfabético) en materia de movilidad, industria del automóvil, infraestructuras o energía que afectan en el día a los ciudadanos.
Partido Popular: posponer la prohibición de los coches de gasolina
En lo que toca al automóvil, el Partido Popular en su programa propone postergar la prohibición a los coches térmicos desde 2035 hasta que los eléctricos sean asequibles y haya una infraestructura suficiente. También medidas para paliar las diferencias de precio con los modelos chinos.
En materia de transporte se centran en el viaje colectivo en avión, sin medidas de movilidad urbana alternativa o fomentar el transporte público. También incluyen en su programa un plan que garantice el buen estado de las carreteras.
Posponer la prohibición de los coches de gasolina y más puntos de recarga. Los populares proponen en su programa dilatar la prohibición de vender coches gasolina y diésel más allá de 2035, sin poner fecha, bajo la premisa de que se haga cuando baje el precio de los eléctricos y haya una red de carga suficiente tanto en España como en toda la Unión Europea, la cual debe garantizarse desde el Gobierno de la UE.
Proteccionismo para el coche eléctrico europeo. Inciden en tomar medidas contra los efectos del dumping de precios en lo que respecta a los coches eléctricos importados desde China y así impulsar los fabricados en Europa.
Eliminar costes extras por maletas o viajar con niños y más multas a las compañías por retrasos. En materia de transporte colectivo, las medidas se centran en los viajes en avión. Por un lado, modificar la normativa para que se prohíba el cobro extra por escoger asientos para que las familias con niños viajen todos juntos y por otro prohibir las tasas abusivas por maletas de mano. También que se aumenten las indemnizaciones por retraso o cancelación de vuelos.
Autovías en buen estado. Creación de una normativa que garantice el mantenimiento y buen estado de autovías y autopistas en toda la Unión Europea. Prometen además acelerar el despliegue de las redes que conectan a España con el resto de Europa, especialmente el Corredor mediterráneo europeo, el Corredor atlántico europeo y la ruta Andalucía-Algarve.
Electricidad más limpia y barata. Exigen una estrategia a nivel europeo que reduzca la diferencia de precio que hay en Europa respecto a EE.UU. y China, " garantizando el suministro y reduciendo la dependencia de fuentes primarias". Para ello proponen medidas como la la aceleración de los permisos para la generación eléctrica, incluyendo energías renovables, o el desarrollo de infraestructuras para el acceso a renovables las 24 horas del día. También mantener e impulsar la energía nuclear para reducir emisiones y "mantener precios bajos y estables".
PSOE: transporte público barato y multas por no implantar las ZBE
Las medidas del partido socialista se focalizan en "continuar desarrollando y garantizando el cumplimiento de los compromisos climáticos, ambientales y sociales derivados del Pacto Verde Europeo". Entre sus medidas encontramos el impulso del transporte público, pero no de la movilidad alternativa o sistemas de economía circular.
En lo que respecta al coche eléctrico no se contemplan planes específicos, aunque sí recogen el impulso de su industria e infraestructura con una mayor inversión pública.
Transporte público más asequible, accesible, conectado y sostenible. Los socialistas defienden la movilidad como un derecho universal y proponen "abordar la pobreza en el ámbito de la movilidad" y mejorar conexiones y su accesibilidad, sobre todo en regiones ultraperiféricas y en zonas rurales o poco pobladas. También impulsar el ferrocarril con el impulso del Corredor Atlántico y el Mediterráneo como principales ejes de movilidad para pasajeros y mercancías.
Multas para las ciudades que no implanten las ZBE. Pese a que se exigen en la normativa española, plantean que se obligue a su implantación desde Europa y que se contemplen sanciones por incumplimiento. En España, las ciudades de más de 50.000 habitantes (unas 150) deben tener una ZBE desde enero de 2023, pero aún pocas lo han hecho.
Establecer definitivamente el objetivo de reducción de emisiones para 2040. Tal y como se recoge en la Ley Europea del Clima debe definirse en esta legislatura. Para ello, se centran en fomentar la descarbonización del sistema energético con el impulso de energía renovables, sistemas de almacenamiento y mejorar la eficiencia energética.
Economía circular y climáticamente neutra en 2050. Se remiten a alcanzar el Pacto Verde Europeo con medidas con el concepto "quien contamina paga". Por ejemplo bonificando o penalizando fiscalmente a las empresas según sean o no respetuosas con el medio ambiente en sus actividades. Asimismo, plantean impulsar la economía circular como alternativa al modelo actual de consumo de recursos naturales finitos, incluyendo materias primas fundamentales.
Reforma del mercado eléctrico y autoconsumo. Enfocado en medidas que permitan un sistema más limpio, democrático y distribuido. También quieren fomentar el autoconsumo y el derecho a compartir energía renovable a través de las comunidades energéticas.
Podemos: movilidad más barata y sostenible, incluyendo en coche
El programa de Podemos contempla impulsar el coche eléctrico y abaratarlo, con planes industriales, pero dejando fuera a los híbridos. Además de fomentar el uso del transporte público (que sea gratuito o muy barato) o la movilidad sostenible, impulsar las renovables o abaratar la factura de la luz, así como la creación de eléctricas públicas.
Más coches eléctricos y de hidrógeno. Proponen el objetivo de llegar al 25 % a los cero emisiones en el mix de ventas en Europa y llegar hasta el 70 % en 2030 para cumplir el objetivo del 100 % en 2040. La media europea de eléctricos ahora mismo ronda el 15 %. Para ello plantean la colaboración entre fabricantes y países para adaptar sus procesos de producción al coche eléctrico, reduciendo costes para abaratarlos al consumidor. También una línea de inversión público-privada en I+D para el la producción de baterías, motores eléctricos o tecnologías de hidrógeno en Europa.
Mejorar la fiscalidad verde. Reducción del impuesto de circulación o de matriculación para coches híbridos y eléctricos o establecer desgravaciones por el uso de transporte público. En España, los eléctricos ya están exentos del impuesto de matriculación así como los coches de hasta 120 g/km de CO₂.
Transporte público gratuito para menores de 26 años en toda Europa. En vez de una tarifa plana europea, Podemos plante una tarjeta europea de transporte gratuita para trayectos urbanos, entre ciudades y entre estados miembros para jóvenes. Y que para el resto de usuarios sea de un euro por trayecto. Además, quieren promover el transporte público como principal medio de movilidad en Europa o aumentar la inversión en infraestructura ferroviaria para viajeros y mercancías o la creación de ejes transversales en zonas transfronterizas.
Movilidad alternativa y mejorar el transporte público. Incrementar los carriles bici imponiendo objetivos mínimos de kilómetros según orografía, población y clima de las ciudades, aplicar bonificaciones fiscales para las empresas que faciliten la movilidad compartida. También incrementar la frecuencia en medios de transporte público metro, autobuses o cercanías, así como media distancia o bien crearlo donde no exista. Asegurar comunicación de tren en los municipios de más de 20 000 habitantes en 2030.
Planes de movilidad sostenible en ciudades y centros de trabajo. Podemos propone que las ciudades de más de 50.000 habitantes y las empresas con más de 100 empleados establezcan planes de movilidad que incluyan rutas, acceso y transporte alternativo al coche privado. Y que los ayuntamientos aseguren la infraestructura y redes que lo permitan. Además, en el transporte por carretera plantearán un Programa Europeo de Reducción de Emisiones para impulsar los camiones eléctricos y de combustible alternativo.
Más zonas verdes y todas las calles de 30 km/h en ciudad. Para reducir la contaminación ambiental y acústica en las urbes, plantean la ampliación de zonas peatonales y zonas verdes (parques, jardines, cinturones verdes etc)-, fomentar las sendas urbanas o que la limitación a 30 km/h se extienda a todas las vías urbanas (excepto en determinadas áreas).
Impulso a las renovables y edificios más eficientes. Proponen el objetivo de reducir a la mitad la producción energética primaria basada en combustibles fósiles en 2030 para llegar en 2040 al 100 % o un impuesto estatal que penalice a las energéticas por producción de fuentes no renovables. Y un Plan Europeo de Rehabilitación de Edificios para mejorar su eficiencia energética.
Factura de la luz más barata, impulsar el autoconsumo y eléctricas públicas. Plantean que el fijo de la factura no sea superior al 25 % y que el precio de los kWh sea progresivo, penalizando el derroche pero abaratando el imprescindible. También ayudas directas para instalaciones renovables en hogares y comunidades, una normativa que favorezca las instalaciones de autoconsumo compartido o impulsar la creación de empresas eléctricas públicas para empujar a los mercados a bajar las facturas.
Sumar: adelantar la descarbonización a 2040
La recién llegada coalición de grupos de izquierdas, de la que se ha desmarcado Podemos, plantea en su programa impulsar aún más el transporte público y la movilidad alternativa, medidas para combatir la pobreza energética, mejorar el Pacto Verde Europeo y un objetivo de reducción de emisiones más exigente que adelante la descarbonización a 2040.
No incluyen medidas enfocada al impulso del coche eléctrico más allá de mejorar la red de carga para los enchufables.
Tarifa plana europea de transporte público. Proponen instaurar un sistema de billetes asequible, similar al Deutschland-Ticket alemán, para viajar entre los países de la UE, especialmente entre los contiguos favoreciendo el transporte público transfronterizo. También mayor inversión en infraestructuras ferroviarias para crear una red de ferrocarril paneuropea y electrificada antes de 2030.
Planes de movilidad urbana sostenible en ciudades. Basada en la infraestructura: creación de amplia red de carriles bici (incluyendo entre ciudades con el desarrollo del EuroVelo), expansión de red de carga para coches y vehículos eléctricos y otras soluciones de movilidad como teleféricos y ascensores urbanos. Para ello plantean aumentar la inversión de los fondos europeos a 20 mil millones de euros para 2030. También proponen prohibir la reversión de los carriles bici, especialmente los creados gracias a los fondos europeos.
Reducción de emisiones más exigentes para adelantar la descarbonización a 2040. Sumar propone reducir las emisiones de los estados miembros en un 65 % para 2030 en vez de en un 55 % como se estipula ahora. Así, pretenden que la descarbonización completa sea en 2040 en vez de 2050. Igualmente aumentar las renovables en el mix energético con un objetivo inculante del 50 % en 2030 y un 80 % para 2040 y abaratarlas.
Eliminar la energía nuclear y el gas de la taxonomía verde europea. Ambas se consideran como sostenibles en Europa, algo que se intentó revocar sin éxito en 2022. Añaden el desmantelamiento del parque nuclear europeo y la gestión de residuos peligrosos.
Transición energética justa. Sumar plantea crear una subvención destinada a financiar la renovación energética térmica de las viviendas europeas y a cambiar su sistema de climatización (calefacción y aire acondicionado) para favorecer tecnologías climáticamente neutras, como las bombas de calor. Objetivo: 500.000 viviendas rehabilitadas anualmente antes de 2030. Igualmente en su programa se recoge implantar modelos de tarifas eléctricas que permitan precios más justos y promuevan un uso eficiente de la energía.
Combatir la pobreza energética y garantizar los servicios básicos. Regular el acceso al agua y a la energía como derechos básicos blindándolo a nivel constitucional y definirlos como comunes, públicos y universales. Asimismo, proponen que cada país defina la pobreza energética y medidas de regulación para combatirla o garantizar instalaciones de calefacción o refrigeración esenciales en estos hogares. Para subvencionarlo, se destinarían fondos derivados de impuestos ambientales o los ahorrados de subvenciones a las industrias de combustibles fósiles.
Mejorar el Pacto Verde Europeo. Para desarrollar una política industrial fuerte al nivel de China o Estados Unidos, que potencie la transición energética hacia la descarbonización completa de la economía y así la UE recupere su papel de liderazgo como promotora de una planificación ecológica en clave democrática a escala global.
Crear una agencia europea de materias primas críticas. Este organismo se encargaría de monitorizar el estado general y la accesibilidad de recursos estratégicos y, si proceden de terceros países, asegurar que preserven los derechos humanos y garantías ambientales.
Incrementar la garantía y derecho a reparar. Para luchar contra la obsolescencia programada Sumar propone aumentar el periodo de garantía de fábrica de los productos y bienes de consumo, asegurar el derecho a reparar y exigir el suministro de repuestos por un mínimo de 10 años. El derecho a reparar se acaba de reforzar en la UE y la garantía se ha aumentado un año más.
Además, en su programa encontramos medidas como la aplicación de un impuesto mínimo del 15 % sobre los beneficios de las petroleras o un impuesto adicional a los combustibles fósiles, pero que no recaiga en los usuarios, sectores vulnerables o servicios esenciales. También quieren que la información sobre la calidad del aire sea accesible a la ciudadanía.
VOX: revertir el Pacto Verde Europeo y la Agenda 2030
En dirección completamente opuesta a la Agenda 2030 y el Pacto Verde, en su programa Vox propone derogar todas sus medidas y exigencias derivadas. También son contrarios al apagón térmico y que se mantengan los coches gasolina y diésel más allá de 2035 y 2050, más allá de la excepción de los e-fuels. A nivel energético, todas sus medidas son proteccionistas tanto a nivel de España como de Europa, y son contrarios a la reducción de las plantas térmicas y nucleares.
En su programa no se recoge el impulso del transporte público o de formas de movilidad alternativa y en general todo lo que se relaciones con medidas de reducción de emisiones en el transporte.
Derogar el Pacto Verde Europeo y acabar con la Agenda 2030. Prometen revertir todas las medidas derivadas del Pacto Verde Europeo y la Agenda 2030, suspender cualquier legislación derivada de ambos, incluyendo la Ley Europea sobre el Clima o la Ley del Cambio Climático. También exigen la elaboración de informes de impacto completos en base a estas medidas implantadas.
Coches de gasolina más allá de 2035 y 2050. En su programa se recoge acabar con las medidas contempladas en el paquete "Objetivo 55", en especial la prohibición de vender coches y vehículos de combustión en 2035 y su circulación en 2050 poniendo en el foco el perjuicio que causará en consumidores y empresas. Y en general poner a fin a cualquier medida que "criminaliza" la industria del automóvil, garantizando la continuidad de los coches con motores de combustión.
Abaratar la factura de la luz y proteccionismo energético. Para reducir el precio al consumidor final proponen un Plan Nacional de Soberanía Energética para reducir la dependencia de otros países, así como reducir los impuestos verdes que se aplican a la factura. También dejar sin efecto el el sistema europeo de restricciones a las emisiones de CO2 y la obligación de adquirir "derechos de emisión". También quieren implantar la transparencia total sobre los precios de la energía desglosándolos por tipo de producción.
Prorrogar la vida de las centrales nucleares y centrales térmicas, y un mayor proteccionismo europeo. Son contrarios al desmantelamiento de las plantas nucleares y al cierre de las las centrales basadas en combustibles fósiles, de las que ya sólo quedan dos grandes en funcionamiento en España. Proponen estimular un mix energético en la UE que incluya energía fotovoltaica, eólica, hidráulica y nuclear y las utilice de forma proporcionada para garantizar la soberanía energética.