El Gobierno ha puesto sobre la mesa la posibilidad de que las autovías dejen de ser gratuitas en 2020. Esto se debe a que Fomento ve complicada la financiación de las carreteras españolas de aquí a menos de dos años. Según el ministerio, la única vía para asumir los 11.000 millones de euros anuales que cuesta mantenerlas, pasa por establecer un modelo de financiación estable. Lo que se traduciría en cobrar por uso también en determinadas autovías.
Estaríamos pues ante un posible escenario que, sobre todo en el caso de acometer largas distancias, supondría aún más dinero para el bolsillo de los conductores si le sumamos el precio de las autopistas que ya son de pago, así como el gasto de combustible. La pregunta es inevitable, ¿cuánto tendríamos que pagar de más en este supuesto?
La propuesta de Fomento no ha ido acompañada de un modelo definido, es decir, no se han atrevido a mencionar una cifra. No obstante, sí lo ha hecho Seopan, patronal de las concesionarias, que ha propuesto una tarifa de 3 céntimos por kilómetro tanto para los tramos de autopistas cuya concesión finaliza entre 2019 y 2021, como para las propias autovías de la red estatal.
Tomando como referencia este supuesto coste por kilómetro, vamos a calcular lo que supondría un viaje desde Madrid a tres ciudades españolas sumándolo al ya existente. Para ello, ponemos tres ejemplos, Madrid - Barcelona, Madrid - Santiago de Compostela y Madrid - Cádiz (tres trayectos entorno a los 600 kilómetros), escogiendo como vehículo un Volkswagen Golf VII diésel con motor 1.6 de 110 CV. De igual manera, optamos en cada caso por la ruta más rápida que nos ofrece Via Michelín.
¿Qué diferencia habría si las autovías estatales son de pago?
Actualmente, ir de Madrid a Barcelona, escogiendo la ruta que incluye la A2, la AP-2 y la AP-7 supone un total de 32,45 euros en peajes: los 30 euros de la AP-2 (que se toma en Zaragoza) sumados a los 2,45 euros del pequeño tramo de Martorell en la AP-7. A ello habría que añadirle el combustible, en este caso gasóleo, que se cifraría en 54,32 euros. El coste total a día de hoy es, por tanto, de 86,77 euros.
En caso de que en la A2 se cobrase a 3 céntimos cada kilómetros recorrido, 320,50 kilómetros en caso de esta ruta, estaríamos hablando de 9,61 euros adicionales, lo que se traduce en un total de 96,30 euros.
Por su parte, acometer un viaje desde Madrid a Santiago de Compostela, escogiendo la ruta que incluye la A6, la AP-6, la A-52 y la AP-53, tiene un coste total de 71,41 euros: 18,40 corresponden a peajes (AP-6 12,50 euros y AP-53 5,90 euros) y 53,01 euros al combustible.
Pero si la A6, de la que se recorre un total de 193 kilómetros, y la A-52 (213 kilómetros) cobrasen los mencionados 3 céntimos, estaríamos hablando de 5,81 euros adicionales en el caso de la primera y de 6,39 euros en el del la segunda. El total serían 12,20 euros más que, sumados a lo que nos cuesta hoy, suponen 83,61 euros.
Por último, realizar un Madrid - Cádiz, yendo por la A5, la A4 y la AP-4, supone para el bolsillo un total de 63,09 euros. En este caso el coste en peajes es poco en comparación con las dos anteriores, 7,30 euros, mientras que el combustible supone 55,79 euros. Pero si en la ecuación la A5 (503,5 km) y la A4 (42 km) pasan a ser de pago, estaríamos hablando de 15,10 euros y de 1,26 euros respectivamente, es decir, 16,36 euros adicionales. Sumados a los 63,09 euros mencionados nos da un total de 79,45 euros.
| RUTA | CON AUTOVÍAS GRATUITAS | CON AUTOVÍAS DE PAGO (3 CENT/KM) | DIFERENCIA |
|---|---|---|---|
| Madrid - Barcelona | 86,77 euros | 96,30 euros |
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| Madrid - Santiago de Compostela | 71,41 euros | 83,61 euros |
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| Madrid - Cádiz | 63,09 euros | 79,45 euro |
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El coche, más barato si viajan dos personas o más
A colación de esto, se nos ocurre otra pegunta, ¿sale más a cuenta viajar en otro tipo de transporte, como el tren o el avión, respecto al vehículo privado? Pues depende de muchas variables (fecha, número de viajeros, antelación de compra, ofertas...). Centrémonos en cuántas personas viajan. Comparando varios precios, enseguida nos damos cuenta de que, en caso de viajar solos, el vehículo privado es más caro.
Por poner algunos ejemplos, si compramos un billete en Madrid para pasar un fin de semana en Barcelona y lo hacemos con 15 días de antelación, los precios de tren, AVE en este caso, oscilan entre los 97 y los 116 euros, siempre optando por salir entre las 6:00 y las 15:00. Por su parte, en avión sería de entre 80 y 100 euros aproximadamente.
Hay que tener en cuenta que normalmente los billetes se compran de ida y vuelta, por lo que en coche, a día de hoy, entre peajes y combustible, ir y volver a Barcelona desde Madrid cuesta 173,54 euros. Incluso comprando un billete con 24 horas de antelación, sigue siendo más barato hacerlo en tren o en avión en este caso. En AVE estaríamos hablando de unos 130 - 150 euros y el del avión de 133 - 170 euros. Por no mencionar el ahorro de tiempo y esfuerzo.
La cosa cambia en el momento en que dos o más personas acometen el viaje, ya que el coste del billete (siempre hablando de ida y vuelta) se multiplica por el número de viajeros. En este caso, ofertas y chollos aparte, siempre suele más barato hacerlo en coche, que además, dado el caso, permite compartir los gastos del trayecto.
Hagamos el mismo cálculo, por ejemplo, con Santiago de Compostela. Actualmente ir y venir en coche a la capital gallega desde Madrid nos supone un gasto de 142,82 euros sumando ambos trayectos. El billete de tren nos cuesta entre 31,30 y 36,65 euros comprándolo con antelación y entre 33,80 y 58,65 euros si lo hacemos con sólo un día de margen. En este caso, incluso sale más económico que dos personas hagan el trayecto en tren, ya que en el caso más caro estaríamos hablando de 117,30 euros. El destino, obviamente, es determinante (conexiones, frecuencia de trayectos...).
Pero, ¿y si las autovías dejan de ser gratuitas?
Con los ejemplos analizados, el panorama no cambiaría en caso de que las autovías comenzasen a cobrar por uso. Si es un solo viajero, sigue siendo más barato el tren o el avión. De ser dos o más, sin embargo, dependería del trayecto como ocurre ahora, pero lo habitual es que en automóvil salga más económico. Al final estamos hablando de un margen pequeño, entre 19,22 y 37,72 euros más.
En definitiva, si las autovías estatales fuesen de pago, apenas notaríamos diferencia con la actualidad si hacemos comparativa entre vehículo propio, tren o avión.
Ahora bien, de lo que sí estaríamos hablando es de entre 20 y 40 euros más cada vez que quisiésemos acometer estas rutas. Y en este caso estamos hablando de viajes puntuales y no de diarios o habituales, donde la cuantía sería más elevada. Por no mencionar, que las autovías estatales también han sido financiadas por el bolsillo de los contribuyentes...