Como sabemos, China es el principal mercado automovilístico del mundo, de manera que afincarse allí es para los fabricantes un caramelo que no se puede desaprovechar. Citroën va a hacer lo propio con el Citroën DS5 en su versión local. De hecho, en China la marca comercial DS lleva ya 15 meses de recorrido con su propia red comercial y sus propios productos, de manera que el terreno está ya tanteado para recibir la llegada de la berlina gala.
La factoría que se encargará de llevar a producción el DS5 está en Shenzhen, la megalópolis de 12 millones de habitantes que queda al sur de la provincia de Cantón. Desde allí, el DS5 tendrá por misión cautivar a los miembros de la élite china con argumentos de coche premium en un mercado en el que ahora mismo todo es una invasión de los fabricantes exteriores más variados.
Por su parte, DS lleva ya 50 centros, los llamados DS Store, implantados en las 40 ciudades más destacadas del país asiático. Allí se pueden conocer los modelos de la marca y los clientes reciben servicios personalizados. Servicios premium para clientes premium en un mercado premium para el sector.
Como remate de esta expansión comercial, el grupo francés ha tenido que invertir una buena suma de dinero en el DS World, un escaparate que ha sido inaugurado en una de las calles comerciales más importantes de Shanghai, Nanjing Road. Desde allí, la línea DS saluda al que ya es el Nuevo Mundo para los fabricantes de automóviles.