Canarias se ha marcado el objetivo de producir el 30 por ciento de su energía eléctrica con sus parques eólicos y fotovoltaicos el año que viene, aunque para ello se han de mejorar las infraestructuras actuales y poner a funcionar más instalaciones.
A largo plazo, el objetivo final es poder reducir los 13 millones de toneladas de gases nocivos que emiten las Canarias, según los últimos datos del Observatorio Canario de la Energía (OECan de 2019). Un reto mayúsculo que necesitará una inversión a la altura.
Un reto inmenso para aprovechar la oportunidad que ofrecen ‘las afortunadas’
El pasado 30 de abril, California (EEUU) lograba un hito histórico: cubrir por completo su demanda eléctrica con energías renovables durante unos minutos. Algo, que hace casi ocho años logró también Dinamarca. ¿Podría llegar a suceder algo así en España?
Canarias es una de las CCAA en la que se dan las condiciones para favorecer el auge de la energía fotovoltaica, pero de momento tiene que conformarse con lograr este tipo de logros en momentos muy puntuales.
Según datos de la Red Eléctrica de España (REE) el año pasado se alcanzó el récord de cubrir el 48,4 % del total de la generación eléctrica española con renovables. Canarias se quedó en el 19,9 %. Y, aunque respecto a años anteriores es un logro (hace cinco años apenas superaron el 7,5 %), todavía no es suficiente para igualar el ejemplo de California.
Por el momento, desde el Consejo de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias, con José Antonio Valbuena a la cabeza, aseguran que "Canarias superará en el año 2023 la barrera del gigavatio de potencia instalada proveniente de fuentes renovables”, un hito determinante para las islas.
Según el consejero, la implantación de las renovables "alcanzará un 30 % de este tipo de energías alternativas frente al 20 % actual” una vez empiecen a funcionar los proyectos ya autorizados como los de los programas Eolcan y Solcan.
En total, Canarias ha solicitado a la Dirección General de Energía 511,01 MW de instalación de renovables, de los que ya se han aprobado 372,17 MW (un 72,83 %).
Del montante restante, ya hay que restar 24,28 MW que no podrán materializarse al existir un pronunciamiento desfavorable de los cabildos de Lanzarote y Fuerteventura y 49,43 MW que no han obtenido luz verde por no tener la Declaración de Impacto Ambiental favorable. Otros proyectos siguen en fase de análisis.
Para avanzar en la hoja de ruta que establece los objetivos a lograr para conducir a las Islas a la neutralidad climática en 2.040, una de las paradas estratégicas es 2.030, año en el que se pretende que casi el 60% de la demanda eléctrica de Canarias provenga de energías renovables.
“Esto va a suponer movilizar en torno a 5.500 millones de euros de inversión, pero nos supondrá un ahorro anual de unos 930 millones de euros”, según Valbuena.
Y es que, aunque de manera muy progresiva, las energías renovables van haciéndose un hueco en el mix energético: una tendencia que trae consigo espectaculares bajadas en el precio de la energía, como fue el caso de España en el mes de abril.
Más allá de los objetivos a largo plazo, y para acelerar la transición hacia un mayor protagonismo de las renovables en las Islas Canarias cuanto antes, desde el consejo de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias -con José Antonio Valbuena a la cabeza-, se pide a Madrid un impulso.
Así, próximamente se presentará al Ministerio de transición Ecológica un documento en el que se recojan las acciones y el marco específico que ayudaría a las Islas, incluyendo “criterios a seguir para la sustitución de los equipos actuales”, ha dicho Valbuena. Muchos de ellos, cuentan con potencia insuficiente o no funcionan con el rendimiento que se espera.