La repentina marcha de Honda deja a Red Bull y a todo el entramado híbrido de la Fórmula 1 contra las cuerdas

La marcha de Honda de la Fórmula 1 al final de la temporada 2021 ha dejado muy tocada a la categoría reina del automovilismo, mucho más de lo que han querido dar a entender. Cuando entre la nueva reglamentación en vigor tan solo habrá tres motoristas en pistas y veremos cuántos equipos, porque dos acaban de quedarse sin propulsores.

La Fórmula 1 ha defendido a capa y espada la presencia de los motores híbridos en la categoría escudándose en que era lo que pedían las marcas. Sin embargo, desde 2014 la única que ha mostrado interés por entrar es Honda, y ya se ha ido. Mercedes, Renault y Ferrari vuelven a quedar como los tres únicos motoristas.

Porsche, motores propios y abandono de la Fórmula 1, los rumores sobre Red Bull

Los rumores en torno a qué motores utilizará Red Bull en 2022 están disparados. Para la Fórmula 1 es un mazazo no solo por perder una marca como Honda, sino que además el equipo que más cerca está de competir con Mercedes, Red Bull, de repente se ve obligado a perder gran parte de su autonomía.

A partir de 2022, Red Bull utilizará los motores de una gran marca con equipo propio. Sea Renault, Ferrari o Mercedes, el equipo de las bebidas energéticas quedará en una situación muy peligrosa. Son una estructura temida, así que a buen seguro el motorista en cuestión les querrá controlar todo lo posible. Sin Honda, Red Bull pierde mucho potencial.

Se han hablado de posibles soluciones a este problema. Una información apunta a que Red Bull estaría valorando quedarse con los motores de Honda en propiedad y desarrollarlos ellos mismos. Es decir, por así decirlo, que Red Bull se convierta en su propio motorista. Ahora mismo parece una opción muy difícil por un tema de infraestructuras.

En Alemania han surgido informaciones que apuntan a que Red Bull estaría negociando con Porsche para que entre en la Fórmula 1 como su motorista. Encaja con informaciones pasadas que apuntan al interés del Grupo VAG en entrar en la categoría, pero el problema es que, como pronto, se fecha el proyecto de cara a 2026. Demasiado tarde.

Por último, también se rumorea en el paddock la posibilidad que sería más catastrófica para la Fórmula 1: que Red Bull abandone la categoría como lo ha hecho Honda, espantada por la falta de competitividad. Serían dos equipos menos, el de Red Bull y también el de Alpha Tauri. La Fórmula 1 se quedaría con ocho y en el peor momento de su historia.

Con el reglamento en la mano, el motorista que surta a menos equipos debería ser el encargado de darle motores a Red Bull y Alpha Tauri. Y ese, de momento, es Renault, que la próxima temporada va a perder a McLaren, que se va a Mercedes, y por lo tanto se quedará tan solo como suministrador de Alpine, su propia estructura.

Pero en las últimas fechas se viene hablando de que Renault mantiene conversaciones con el equipo Haas para que los americanos dejen a Ferrari y se conviertan en una especie de equipo afiliado a Renault, en el que puedan encontrar un hueco jóvenes promesas de la escuela francesa como Christian Lundgaard.

Si esto se lleva a cabo, Ferrari y Renault quedarían con dos equipos cada uno, así que podría darse el caso de que uno se viese obligado a suministrar a Red Bull y el otro a Alpha Tauri. Una situación dantesca que tan solo habla del triste momento que está viviendo la Fórmula 1, acuciado por la falta de competitividad y el lógico desinterés de las marcas.

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