Se las prometía muy felices Ferrari después de las tres primeras carreras de la temporada de Fórmula 1, pero el fatalismo ha vuelto a encontrarse de cara con la mítica escudería italiana. Después del Gran Premio de Australia, Charles Leclerc iba líder del mundial con 34 puntos de ventaja sobre George Russell y 46 respecto a Max Verstappen, que iba sexto.
Solo cinco carreras después, Verstappen ya es líder 21 puntos de renta sobre su compañero de equipo, Sergio Pérez, y 34 respecto a Leclerc. Ha sido la gran debacle de Ferrari que, una vez más, les deja en una situación alejada de poder luchar por el título. Todo lo que podía salir mal está saliendo mal, excepto el propio Leclerc.
Sainz ya es el peor piloto en clasificación de 2022
El Gran Premio de Azerbaiyán fue el gran fiasco definitivo para Ferrari. Solo hubo cinco abandonos en carrera, pues cuatro de ellos fueron coches que llevaban su mecánica. Y todos por averías. A Leclerc se le rompió el motor mientras iba líder de la carrera con cierta ventaja, pero también Carlos Sainz, Kevin Magnussen y Guanyu Zhou acabaron fuera.
En el caso de Sainz fue un problema hidráulico que apareció incluso antes que el de Leclerc, pero lo de Magnussen (Haas) y Zhou (Alfa Romeo) fueron averías en el motor. Especialmente doloroso en el caso del chino, que estaba haciendo una gran carrera en la zona de puntos. La mala fiabilidad no parecía una gran lacra para Ferrari, pero ahora ha aparecido.
De hecho, el equipo Ferrari ya es el que más abandonos acumula esta temporada. Además de los dos de Bakú, hay que sumar la avería de Leclerc cuando iba líder holgado en Barcelona y los incidentes de Sainz en Imola y Australia. Son cinco retiradas después de solo ocho carreras. Van líderes en solitario de este funesto ranking.
En Bakú también apareció otro punto que está matando a Ferrari esta temporada: las lentas paradas en boxes. Esta vez le tocó sufrirla a Leclerc, que entró a cambiar sus ruedas para aprovechar un coche de seguridad virtual pero se encontró con una parada de más de cinco segundos. Insostenible.
Además, el Ferrari parece que es un coche que tiene un extra a una vuelta, pero en ritmo de carrera está claramente por detrás del Red Bull. Ha sido la tónica de los últimos Grandes Premios. El problema es que ni siquiera en Mónaco fueron capaces de ganar teniendo tal virtud, ya que la liaron con la estrategia. Son cinco carreras seguidas sin vencer.
Mientras que Leclerc está haciendo una temporada casi impoluta, más allá de errores como el de Imola o la propia salida de Bakú, lo de Sainz empieza a ser muy complicado: ya es el único piloto que no le ha ganado ni una sola clasificación a su compañero de equipo. Y conforme resurge Pérez cada vez se hunde más como el más lento de los cuatro líderes.