El futuro de Carlos Sainz está empezando a tomar tintes muy rocambolescos. Tanto que ya hay hasta quien duda que vaya a correr en Fórmula 1 la próxima temporada. Sainz sigue retrasando la decisión sobre su próximo equipo, y hay quien ya se ha cansado de esperarle: parece que Williams ha descartado su fichaje.
Hace solo diez días Sainz lo tenía todo cerrado con Williams, hasta el punto de que estaba previsto anunciar su fichaje en el Gran Premio de España. Pero Sainz volvió a poner todo en stand-by por la irrupción de Alpine y la seductora figura de Flavio Briatore. Sainz está tensando mucho una cuerda que en cualquier momento se puede romper.
Si Sainz quiere evitar a Audi a toda costa, parece que ya solo le queda Alpine
"Quiero disfrutar de este podio porque no sé cuándo llegarán en el futuro. Algunos equipos han puesto presión sobre mí, pero yo ahora quiero disfrutar. Seré honesto y directo con los equipos. Me tomaré el tiempo que quiera, porque es una decisión importante para mí. Si algunos equipos están impacientes no puedo hacer nada".
Esas fueron las palabras de Sainz tras el Gran Premio de Austria, en el que cazó el quinto podio de la temporada. El equipo que está poniendo presión sobre él es Williams, tanto que parece que el acuerdo está completamente roto y el equipo de Grove ha comenzado a buscar otro piloto que acompañe a Alexander Albon en 2025.
No es el primer equipo que descarta a Sainz. El madrileño primero esperó a Red Bull, pero acabaron renovando a Sergio Pérez. En Mercedes también parecen que ya han decidido que subirán a Andrea Kimi Antonelli salvo que haya un giro dramático de los acontecimientos con Max Verstappen. A Sainz se le siguen cerrando puertas.
El único que parece que sigue esperando a Sainz es Audi, pero la sensación desde que empezó este mercado es de que el piloto español ha querido evitar a Audi a toda costa, incluso pensando en equipos que tenía la seguridad de que serían poco competitivos, como Williams. Así que en Audi también se va agotando la paciencia.
Sí, a Sainz le sigue quedando el plan de Alpine. Pero fiarse de una fábrica tan volátil y con tanta austeridad económica no parece el mejor plan. A estas alturas ya es evidente que el mercado de Sainz ha estado pésimamente gestionado, y el temor es que haya enfadado demasiado a demasiada gente, tanto como para quedarse su equipo en la Fórmula 1.
Las opciones se van cayendo de encima de la mesa. Veremos hasta cuándo quiere aguantar Sainz en su búsqueda de un equipo de Fórmula 1 para 2025.
