Continuamos con el repaso a las generaciones del Ford Mustang y nos plantamos en 1974, año para olvidar para la industria americana del automóvil debido a la ya conocida Crisis del petróleo de 1973, un embargo de combustible de los grandes productores árabes que propició la muerte y el fin de los verdaderos muscle cars.
Esta crisis marcó sobremanera a los conocidos como Ford Mustang II, ya que tanto sus motores como su tamaño y diseño se vieron fuertemente condicionados por ella. El downsizing aplicado a todo el conjunto motivó que los nuevos pony car apenas conservasen las características que lo hicieron famoso en su primera generación.
Pero no nos confundamos, el Ford Mustang II para nada fue fracaso por su diseño o sus escuálidos motores. Si por algo hay que felicitar a Ford con estos coches es por saber poner en el momento adecuado el coche adecuado a los gustos de los consumidores. No nos dejemos engañar por sus formas, fue todo un éxito.
Diseño
El cambio en el Ford Mustang II fue bastante radical si los comparamos con la anterior etapa (recordemos, de 1971 a 1973), pero no es tanto cambio si lo comparamos con los primeros modelos. Este diseño se adecúo a las tendencias del momento, pero sin querer salirse mucho de las pautas marcadas en los primeros años.
El tamaño volvió a ser más o menos el mismo que en sus inicios y sus formas respetaban esos inicios. Un largo capó dominada el frontal, con un lateral con ciertas reminisicencias a esa marca cintura que se vió en 1965 con las primeros modelos. La parte trasera era lo más diferente que se podía ver si los comparábamos, aunque conserva los grupos ópticos de tres piezas característicos. Por supuesto, el pony seguía estando en el frontal.
Como dijimos en el anterior repaso de la primera generación, la plataforma Falcon se dejó de usar en 1973. Para el Ford Mustang II se empezó a usar una modificación la plataforma Arizona, usada desde 1970 en el subcompacto de la casa, el Ford Pinto. Sus formas, claramente reconocibles, no le dejan en mal lugar respecto a sus predecesores. No es una preciosidad de coche, pero sí tiene su encanto, sobre todo los modelos con el acabado Ghia y el semitecho de vinilo, muy característico de la época.
Por cierto, en 1974, el año de su lanzamiento, el Ford Mustang II obtuvo el galardón de Car of the Year de la prestigiosa revista Motor Trend.
Principales objetivos
Al igual que en la primera generación, la cabeza pensante que estaba detrás del Ford Mustang II fue, como no, Lee Iacocca. Si en la primera generación se buscó un coche para el pueblo, capaz de satisfacer las necesidades de un amplio rango de clientes, con el Ford Mustang II se buscó la eficiencia en el gasto de combustible (eficiencia de aquellos años, claro está). De ahí vino ese downsizing tan extremo si lo comparamos con el modelo del año anterior.
Otro de los aspectos que se le quiso mejorar al Ford Mustang II fue la calidad de los acabados. Lee Iacocca quería unos standards de calidad para el nuevo modelo sin precedentes en Estados Unidos. En cierto modo, esto es así, puesto que los acabados de esta nueva generación, por lo menos a la vista, si parecían mucho mejores que en anteriores años.
Como innovaciones, la dirección adoptaba el sistema de piñón y cremallera y el motor se montaba sobre un subchasis que reducía las vibraciones y los ruidos dentro del habitáculo. Todas estas características hicieron que el propio Lee Iacocca apodase a esta nueva generación con su Little Jewel.
Las ventas
Aunque esta generación haya sido denostada por los seguidores más radicales de las primera generación, es bien cierto que sus ventas podían dar envidia a todos sus competidores, incluso si las comparamos con la anterior generación y más concretamente con el año anterior.
Si en 1973 Ford vendió casi 135.000 unidades del Ford Mustang, en 1974 esas ventas llegaron ser más del doble que en el año anterior, ofreciendo menos prestaciones y menos opciones de carrocería y modelos. Es digno de alabar que ese año se vendiesen nada menos que 386.000 unidades del Ford Mustang II.
Contando que a pesar de la reducción de tamaño y prestaciones, los precios se mantuvieron más o menos en las mismas cotas (entre 3.134 y 3.674 dólares), se puede decir que Ford volvió a hacer un pleno con el nuevo modelo. Puso justamente el coche que quería la gente en el mercado en el momento preciso. Un momento no muy boyante para su economía, puesto que el embargo de combustible llegó a ser similar al vivido en la Segunda Guerra Mundial.
De hecho, estas cifras de ventas le han valido a la segunda generación para ocupar cuatro de los diez primeros puestos en la lista de ventas anuales absolutas de todos los años del Ford Mustang. Parece mentira que un modelo tan poco querido por los seguidores del pony car tuviese tal éxito.
Datos y cifras
El rediseñado Ford Mustang II se presentó en 1974. Comparado con su predecesor, el modelo de 1973, era 48,2 centímetros más corto y 222,2 kg más ligero, todo motivado por la crisis del petróleo y el necesario downsizing. Estaba disponible con carrocería de tres volúmenes, incluyendo el acabado Ghia como tope de gama, y una carrocería Fastback 2+2.
Por primera vez en su historia, el Ford Mustang no contaba en sus opciones ni con un motor V8 ni con versión descapotable.
Ese mismo año, en 1974, un 1973 Ford Mustang Mach I protagonizó la película Gone in 60 seconds. Siempre he pensado que era amarillo pero Ford anuncia que era naranja. Cosa extraña. Por supuesto, estamos hablando de la Eleanor original.
En 1975, los motores V8 volvieron a los Ford Mustang, pero no con el mismo significado que antes. El nuevo V8 302 sólo entregaba 130 CV y únicamente estaba disponible con transmisión automática.
El paquete de preparación Cobra II se empezó a ofrecer a partir de 1976. Contaba con una entrada de aire en el capó (no funciona), spoilers delantero y trasero y bandas tipo Racing. Se ofrecía con en varias combinaciones: blanco con bandas azules, azul con bandas blancas y negro con bandas doradas. Como podréis imaginar, los nuevos Ford Mustang Cobra II fueron un intento de rememorar los ya famosos Shelby Mustang.
También en ese año, en un intento de volver a conquistar las ventas de los clientes deseosos de comprar un convertible, los modelos con carrocería Fastback empezaron a estar disponibles con el techo T-Top como opción. Un nuevo kit de preparación, el Sports Performance Package, añadía una caja manual de cuatro velocidades al motor V8 302.
En 1978, el nuevo Ford Mustang King Cobra fue el primer modelo en llevar la más tarde famosa insignia 5.0 en los laterales. Estos el equivalente en el sistema métrico a las 302 pulgadas cúbicas del sistema imperial.
Fuente | Ford
En MotorPasion | Ford Mustang: generación de 1964 a 1973