En Espacio Toyota seguimos disfrutando del placer y privilegio que es poder probar la amplia gama híbrida Toyota. Esta vez os relatamos nuestra toma de contacto con el Toyota Prius plug-in hybrid, el modelo que más interés está atrayendo en el público concienciado por la sostenibilidad.
Vamos a empezar nuestra experiencia con el Prius plug-in hybrid hablando de los aspectos más operativos, la habitabilidad, capacidad de carga o equipamiento. En la segunda parte del artículo comentaremos en detalle qué supone la nomenclatura "plug-in" técnica y funcionalmente.
Diseño, habitabilidad y capacidad del Prius plug-in hybrid. Más de lo mismo, afortunadamente
Compartiendo la misma y aerodinámicamente efectiva silueta triangular característica de la tercera generación del Prius, el Prius plug-in hybrid se reconoce, gracias a diversos y sutiles detalles, rápidamente como el modelo de referencia de la familia de híbridos combinados Full Hybrid de Toyota.
El Prius plug-in hybrid se delata como referente de la eficiencia sobre todo por la tapa de recarga de la batería, situada en la aleta posterior del lado opuesto a la del depósito de combustible, que cuenta con el emblema de un enchufe plateado.
Otros detalles específicos de este Prius son el acabado cromado de los tiradores de las puertas, un nuevo y exclusivo diseño de llantas de aleación de 15” y 5 radios, que mejora el rendimiento aerodinámico, y el logotipo ‘Plug-in Hybrid’ montado en el paragolpes delantero.
Como veremos en el siguiente artículo la batería de este Prius es de mayor tamaño pero aun así el plug-in hybrid dispone de un maletero de 443 litros de capacidad, lo que representa solo 2 litros menos que el del Prius estándar, con el comodín que representa disponer de un compartimento de almacenamiento de 22 litros bajo el suelo del maletero.
Con los asientos traseros abatidos, con una división 60:40, nos encontramos con una amplia superficie prácticamente plana que nos da una capacidad de equipaje de 1.120 litros. Un volumen significativo que puede sacarnos de algún que otro apuro.
El Prius plug-in hybrid comparte la arquitectura del salpicadero de la tercera generación del Prius. Una distribución bizona que presenta toda la información en la parte central superior y que proporciona una funcionalidad ergonómica de todos los mandos y el característico cambio de marchas azul.
A veces se echa en falta más protección de la pantalla del navegador que queda algo expuesta a la luz directa. Por lo demás el interior de este híbrido enchufable es muy amplio y cómodo, los tonos me parecen acertados, no me gustan demasiado claros. Gran cantidad de huecos y porta bebidas están disponibles para conductor y acompañante. La guantera doble sigue dispuesta a tragar con todo como en el Prius convencional.
Equipando al capitán del equipo, que no falte de nada
La zona inferior del salpicadero está presidida por la pantalla del sistema de info-entretenimiento Toyota Touch & Go a color. Cada vez me gusta más poder tirar de pantalla táctil en un coche, más rápido e intuitivo imposible. El control del equipo de sonido, la información del vehículo, la cámara trasera y el sistema de navegación por satélite. Todo al alcance del dedo.
El Head Up Dsplay proyecta datos de utilidad en la base del parabrisas, como la velocidad del vehículo, el monitor de conducción ecológica y el estado de los sistemas, opcionales, de Seguridad precolisión y de Control de crucero adaptativo. Es el complemento perfecto para la información que aparece en la zona superior del salpicadero que incluye grupo central de indicadores integrados. Todo esto logra minimizar de forma muy significativa el tiempo que el conductor tiene que retirar la vista de la carretera.
El equipamiento del modelo de prueba incluía un sistema remoto de climatización con bajo consumo de combustible, mandos Touch Tracer montados en el volante (me costó un poco acostumbrarme a su funcionamiento) y el práctico sistema de entrada inteligente sin llave.
Los asientos delanteros cuentan con un nuevo sistema calefactable con regulación independiente, con un mejor control para eliminar las fluctuaciones de temperatura y potenciar el confort. El acceso es bajo la consola central. Tengo los brazos largos y llegué sin problemas pero puede que a otras personas les parezca algo más incómodo.
Y por supuesto ahora ya sólo nos queda hablar del aspecto más técnico de este buque insignia de Toyota; el sistema plug-in de Toyota y el impacto de este aporte extra de electrones en el día a día del conductor del Toyota Prius plug-in hybrid. Os lo contamos todo en la segunda parte del artículo.