Contenidos contratados por la marca que se menciona

+info

Pimp my ride o cómo convertir un clásico en una obra maestra

Entre 2004 y 2007 los amantes del motor nos poníamos delante del televisor casi religiosamente para presenciar el programa 'Pimp My Ride', que en España se llamaría 'MTV Tuning' y en América Latina 'Enchúlame la máquina'.

Aunque los productores buscaban la espectacularidad de los acabados de estilo tuning, algunos realmente imposibles de conducir, el verdadero valor de la serie radicaba en la restauración de vehículos al borde del achatarramiento. Como un amante del arte que se maravilla con la recuperación de una catedral en ruinas, nosotros nos regocijábamos al ver cobrar vida a moribundos automóviles.

En este punto se nos puede venir a la cabeza el programa 'Wheeler Dealers' ('Joyas sobre Ruedas' en España), que se encarga de modelos más clásicos y busca un resultado más fiel al original. Quizás sería una referencia más adecuada para lo que vamos a tratar en este artículo: recuperar la belleza original de un vehículo de otro tiempo y traerlo hasta el nuestro. Son varios los nombres con los que podemos denominar a esta pasión: restauración, coleccionismo, automobilia… Repasemos todo lo que debemos tener en cuenta de este mundillo.

El coche clásico como riqueza económica y cultural

Para entender todo lo que significa la restauración de coches clásicos, podemos partir de uno de los ejemplos más notorios que tenemos en nuestro país: el Salón Internacional del Vehículo Clásico de Madrid. Este evento, que ha tenido varios nombres ya (actualmente lo hace con el de Classic Madrid), ha cumplido 25 años, una cifra que está al alcance de muy pocos eventos en nuestro país. La cita tuvo lugar entre el 21 y 23 de febrero, y ocupó 35.000 metros cuadrados del Pabellón de Cristal de la Casa de Campo de Madrid.

Classic Madrid reúne cada año a miles de profesionales, empresas, federaciones y coleccionistas de todo el mundo

Classic Madrid reúne cada año a profesionales, empresas, federaciones y coleccionistas de todo el mundo. Todos ellos tienen un propósito común: ensalzar el vehículo clásico como gran fuente de riqueza económica y cultural de nuestro país. Precisamente, uno de los temas de debate más recurrentes en los foros del Classic Madrid es la falta de entendimiento y conocimiento de las autoridades públicas. En la carrera medioambiental que disputan las ciudades de nuestro país (de todo el mundo en realidad), el vehículo clásico es el más damnificado, con normativas que lo meten en el mismo saco de los vehículos comunes. Y todo ello sin tener en consideración el valor añadido que nos aporta este sector.

El coleccionismo, mercado e inversión en auge

El coleccionismo de vehículos y la automobilia (objetos de interés relacionados con el mundo del motor) es una industria que mueve millones de euros cada año. No estamos hablando solamente de la compra-venta de automóviles de gran valor, sino de los ingresos que generan el intercambio de recambios, los servicios de talleres especializados o el turismo que atraen los eventos dedicados al coche clásico. Eso por no hablar del fomento cultural que supone: Algunos de los mayores museos de automoción del mundo se nutren de colecciones privadas. Se trata de un movimiento que ganó gran protagonismo en los años 80 y que, tras algunos altibajos, ha recobrado energía en la última década. Parece que ante la llegada del coche conectado y eléctrico, los amantes del motor miran hacia atrás con mayor nostalgia sin cabe.

Internet ha ayudado a extender el coleccionismo a un mayor número de aficionados

También ha ayudado a su crecimiento la popularización de Internet y de los sitios especializados, tanto de compra-venta de recambios como de vehículos ya restaurados. La red de redes ha conseguido dar más visibilidad y democratizar un sector que hasta ese momento era muy especializado, y que ahora se ha hecho más accesible al público generalista.

Todo ello ha contribuido, además, a un novedoso fenómeno: el coche clásico como elemento de inversión. Un modelo clásico especialmente significativo, y no necesariamente caro ni lujoso en su momento, puede aumentar considerablemente su valor económico tras una buena restauración.

Algunos especialmente raros pueden incluso incrementarlo tras un mes de adquisición, si está adecuadamente conservado (aquí tenemos algunos ejemplos). La pasión por un símbolo de expresión cultural como el automóvil ha llevado a que su rentabilidad supere la de otros mercados de inversión, como el arte o las piedras preciosas.

Restauración y coleccionismo: por dónde empezar

Entrar en el mundo del coche clásico puede ser tan difícil como nosostros decidamos complicarnos. Podemos comenzar adquiriendo un vehículo de segunda mano y poniéndolo a punto con algunas técnicas de detailing.

El detallado de coches (conocido también como la cosmética para el automóvil) es una actividad muy común entre los aficionados del motor y un primer paso si queremos mostrar nuestro vehículo o acudir a algún evento. Es muy diferente al tuning, no añade ningún elemento ni modifica las prestaciones, sino que trata de recuperar y resaltar la belleza original de nuestro vehículo.

De lo que se trata es de recuperar y resaltar la belleza original de nuestro vehículo

El detailing nos puede llevar sin darnos cuenta al mundo de la restauración pura y dura. Incluso si lo queremos hacer de forma doméstica, y como simple entretenimiento, debemos planificar la tarea y echar bastantes números.

La restauración puede ser más o menos profunda, desde arreglar elementos estéticos hasta una reforma integral de la mecánica. Y más o menos ambiciosa, para lucir nuestro trabajo en una web de aficionados hasta acudir a concentraciones. Cuanto más adelante queramos ir en el proceso, más tiempo, dinero y conocimientos requerirá nuestro proyecto de restauración.

La restauración estética, tarea fundamental

En el mundo de la restauración amateur, los aficionados suelen limitarse a las tareas de recuperación estética delegando los aspectos más técnicos a profesionales especializados. En este sentido, nos centraremos directamente en todo lo que podamos arreglar del exterior e interior de nuestro vehículo. 

Nuestros compañeros de Motorpasión nos explicaron cómo realizar una restauración de concurso para la carrocería, pero podemos resumirlo en los siguientes puntos:

  • Desmontar de las piezas de la carrocería que podamos retirar para, en la medida de lo posible, hacer el trabajo de restauración por separado.
  • Arreglar las abolladuras y golpes con la técnica más adecuada en cada caso: aplicación de calor, martillo de inercia, etc.
  • Lijar la carrocería y aplicar masilla para uniformar la superficie.
  • Aplicar las capas de sellado y pintura habiendo protegido previamente lunas y otros elementos no desmontables con cinta de carrocero.

Hay que tener en cuenta que el repintado a gran escala de una carrocería nos requerirá el uso de instalaciones profesionales, como una cabina de aspiración o una sala de horneado.

El repintado de nuestro vehículo puede requerir el uso de instalaciones profesionales

En cuanto al interior de nuestro vehículo, ya sabemos cómo limpiar y cuidar nuestra tapicería, pero la restauración del habitáculo podría ir mucho más allá.

  • Desmontar los elementos para pintarlos por separado: salpicadero, botoneras, embellecedores…
  • Proteger lo que no ha sido posible separar con plástico y cinta de carrocero.
  • Lijar las zonas donde la pintura o el color estén desgastados hasta eliminar los bordes. Un segundo lijado más suave de toda la superficie nos permitirá hacer el siguiente paso.
  • Pintar las piezas lijadas siguiendo las instrucciones del fabricante y con pintura específica para cada tipo de material.

No debemos descartar, en todo caso, la sustitución de determinadas piezas que sean imposibles de restaurar. Siempre trataremos de adquirir las originales, pero no siempre es posible. Por suerte, la proliferación de las impresoras 3D ha hecho que podamos contar con piezas prácticamente idénticas a las de fábrica.

Trabajar con talleres como opción en el coleccionismo

Como vemos, el mundo del coche clásico y la restauración puede alcanzar niveles de complejidad que debemos plantearnos en serio. Si lo que queremos es adentrarnos más  profundamente en el sector del coleccionismo, lo más sensato es plantearnos trabajar con un taller especializado.

Algunas antiguas mecánicas pueden llegar a ser muy diferentes a lo que estamos acostumbrados hoy en día, y el aspecto financiero de un proyecto ya puede llegar a convertirse en un trabajo a jornada completa. Ya vimos en Espacio Toyota los periplos que puede suponer el coleccionismo de clásicos de gran renombre como el Toyota 2000GT.

Nuestra recomendación es que, si realmente estás interesado, te lo plantees como algo en lo que crecer poco a poco, y no como una fuente rápida de ingresos. Al fin y al cabo, aquí ninguno estamos por el dinero, sino por la pasión que nos mueve.

Imágenes | Toyota | Classic Madrid | iStock: Supersmario, welcomia, Bhakpong

También te puede gustar

Portada de Motorpasión

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com

VER 2 Comentarios