Hace unos días hablaba con una persona sobre el posicionamiento de las marcas dentro de un mismo grupo. Por ejemplo, a qué público está dirigido Lancia y Alfa-Romeo dentro del grupo Fiat. Pocos días después de ese discurso sobre el estilo de vida urbana, exclusiva, delicada y femenina de Lancia, esa persona me enseñaba las fotos del nuevo Lancia Stratos y me preguntaba cómo encajaba eso.
Mi respuesta fue “¡eso no lo ha hecho Lancia!”, aunque no lo tenía claro al cien por cien. Como decía Manuel, estamos en 2010 y nada nos puede sorprender. Pero efectivamente ya podemos confirmar que el nuevo Lancia Stratos no es un Lancia, sino un proyecto muy peculiar.
El alemán Michael Stoschek es el responsable de haber revivido al Lancia Stratos. Como gran amante del modelo, en 2008 encargó a Pininfarina una reinterpretación de éste, conservando las formas originales pero adaptándolo a un diseño más actual. Después el diseño pasó a Bertone, y con estos dos padres de pedigree nació el nuevo Stratos.
La base utilizada no podría ser más adecuada, el Ferrari F430. Un coche de una categoría superior a la del Lancia Stratos en su época, pero teniendo en cuenta la limitadísima tirada que se pueda realizar del nuevo modelo (25 unidades), quien esté dispuesto a pagarlo querrá que se comporte como un auténtico deportivo. Además, a juzgar por las fotos, parece que han conseguido adaptarlo perfectamente en tamaño y aspecto.
El nuevo Lancia Stratos hereda el motor 4.3 V8 del F430 y tiene la carrocería hecha íntegramente en fibra de carbono. ¿Demasiado avanzado? Hay un detalle que sí se conserva del original y resulta realmente inquietante: la distancia entre ejes es la misma que en el original. ¿Se convertirá en el demonio de Tazmania de los dibujos animados al pasar por una curva?
En Motorpasión | Primeras fotografías reales del nuevo Lancia Stratos