Hoy en día utilizar tecnología moderna en un automóvil con aspecto retro no es ninguna novedad, pero si el protagonista es una réplica de un coche de carreras de los años sesenta como el Porsche 910, la cosa se pone mucho más interesante. El especialista austríaco Kreisel es el artífice de este EVEX Porsche 910e, que a pesar de su fiel parecido al original, incorpora un potente motor eléctrico.
El Kreisel Evex 910e es el primer modelo comercializado por esta marca basada en Austria y fundada por tres hermanos (Johann, Markus y Philipp), y que quizá recordéis por su Clase G eléctrico que promocionó el propio Arnold Schwarzenegger. Este coche se fabricará de forma muy limitada porque, según Kreisel, "sólo se fabricaron 35 chasis del 910 original". ¿Su precio? Un millón de euros.
Aunque es una pena perder la furiosa banda sonora de los motores de 6 y 8 cilindros del 910 original, éste incorpora ahora un potente sistema de propulsión eléctrico compuesto por un motor de 360 kW (483 CV) y una batería de 53 kWh. Promete un gran comportamiento, unas prestaciones de infarto y, además, está homologado para uso en carretera.
Con 1.100 kilogramos de peso, el Kreisel Evex 910e es capaz de despachar el 0 a 100 km/h en sólo 2,5 segundos y superar los 300 km/h. Además, Kreisel promete para este superdeportivo eléctrico una autonomía real de unos 350 kilómetros (suponemos que sin exprimir estas prestaciones, claro) y carga rápida de hasta 100 kW.
Aunque algunos medios han afirmado que se trata de un 910 original y que incluso es el mismo que condujo Steve McQueen en la película Le Mans de 1971, parece que en realidad es una réplica o "reinterpretación moderna" (en palabras textuales de Kreisel) que simplemente recurre a la estética del mítico coche de competición, predecesor del Porsche 907. La información es algo confusa y no entendemos el comentario del fabricante sobre los pocos chasis originales producidos del 910.
Vía | Autonews
Vídeo | Youtube
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