Para contribuir a reducir las emisiones en las ciudades las administraciones también debieran ir incorporando en sus flotas coches eléctricos. Una senda que ya se está tomando en algunos países europeos, que están sumando en sus vehículos patrulla modelos enchufables. Y varios optan por los que ofrece Hyundai: el Kona eléctrico, el Nexo de hidrógeno o el Ioniq Electric están entre ellos.
Aunque no son los únicos: el Toyota Prius, el BMW i3, varios modelos de Tesla (incluida la Cybertruck pese a que no ha entrado en producción) o el Nissan LEAF, por citar algunos ejemplos, también han sido escogidos en los últimos tiempos para hacer las veces de coches de policía.
El Kona EV, el Ionic Electric y el Nexo como escuderos patrulla
El SUV eléctrico Hyundai Kona parece ser el predilecto de entre los modelos alternativos que ofrece la firma asiática: la policía de países como Suiza, Países Bajos, España y Reino Unido ya los ha comenzado a incorporar en sus flotas.
Por ejemplo, en Suiza, las fuerzas de seguridad del cantón de San Galo sumó el año pasado en su parque móvil 13 Hyundai Kona en su versión eléctrica: cinco como coches de policía y ocho como vehículos civiles. También los Países Bajos: en Ámsterdam, Holanda Oriental y Holanda Central, el Hyundai Kona EV está ya patrullando las calles.
Y a ellos se suman Reino Unido y España. En el caso del primero, la policía de Sussex y la del Norte de Gales ya tienen una unidad del todocamino eléctrico en sus filas y el próximo mes, nuevo unidades del Kona se sumarán a la flota de la policía de Hampshire. Por su parte, varios Hyundai Kona policiales ya están operativos en Valencia, tanto en su versión menos potente como en la de mayor entrega.
No obstante, entre la oferta alternativa de Hyundai hay otros dos retoños que se han sumado asimismo a las patrullas de seguridad. Por ejemplo, el Hyundai Ioniq Electric está presente en el parque de la policía de Guadalete y Bilbao en el País Vasco.
Por su parte, el Hyundai Nexo de pila de combustible de hidrógeno, pese a que esta tecnología aún es incipiente en Europa, está siendo utilizado por las fuerzas de seguridad de Inglaterra y Alemania. Aunque en su caso sólo una unidad está operativa en Surrey y Osnabrück respectivamente.
Previamente, en Italia, también se atrevieron con un modelo de hidrógeno de la marca: el ix35 Fuel Cell. Además, la policía del municipio de Brennero ha optado de igual manera por varias unidades del Nexo para vigilar las calles.
Patrullas hacia las cero emisiones
Lo cierto es que además de ahorrar emisiones nocivas a la atmósfera, los modelos electrificados tienen otras ventajas como coches policía, ya que su mecánica silenciosa también contribuye a reducir la contaminación acústica. Aunque a bajas velocidades los de nueva homologación ya están obligados a llevar un aviso acústico para evitar atropellos.
Ya sabemos que la Tesla Cybertruck, la pick-up eléctrica de la compañía de Palo Alto, gusta a la administraciones: por ejemplo un pueblo mexicano ha encargado 15 unidades de este modelo y en Dubai también se lo plantean. No obstante, aún queda más de un año para que entre en producción.
Pero ya hay una oferta cada vez más amplia de modelos electrificados a los que pueden echar mano las administraciones. En el caso de España, la Policía Nacional sumó el año pasado 70 unidades del Toyota Prius+, mientras que la Guardia Civil hizo lo propio con la anterior versión de del modelo híbrido nipón.
Asimismo, el Nissan LEAF, uno de los primeros modelos de cero emisiones en llegar al mercado, también está haciendo las veces de coche patrulla en el municipio de Godella (Valencia): el año pasado la policía local de esta población adquirió una unidad del nipón. Además, lleva haciéndolo tiempo en Japón natal, como por ejemplo en la ciudad de Fukuoka. Otro de los más longevos, el BMW i3, viste también el traje de policía en Los Ángeles (California, EE.UU) o en Roma (Italia).
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