"¿Estaría dispuesto el cliente a pagar un precio mucho más alto por una batería de estado sólido para que la carga sea quizás un poco más rápida?". En BMW lo tienen claro: no. Desde la marca bávara opinan que esta tecnología subiría demasiado el precio de los coches eléctricos en un momento en el que necesitan justo lo contrario.
Así, BMW no incorporará las baterías de estado sólido a sus cero emisiones hasta dentro de unos ocho años. Mientras, marcas chinas como BYD ya planean empezar a equiparlas en sus coches en solo dos años. También Mercedes-Benz quiere hacerlo antes.
Demasiado caras y los coches eléctricos necesitan ser más baratos
Las baterías de estado sólido han sido bautizadas como 'el Santo Grial' del coche eléctrico. Prometen ofrecer mayor autonomía en idéntico tamaño a las de iones litio actuales gracias a su estructura simplificada. También que serán más ligeras (lo que afecta igualmente a su rango entre cargas), más eficientes, menos susceptibles a las temperaturas extremas o más seguras. Y a la larga, se considera serán más baratas de fabricar.
Pero a la larga no significa en un primer momento. Es el argumento que señala BMW para no precipitarse con esta tecnología. Aunque BMW lleva años trabajando en las baterías de estado sólido junto a la estadounidense Solid Power. Se anunció que para este 2025 un prototipo de BMW ya incorporaría esta batería. Pero su producción en masa está muy lejos para la firma bávara.
Su batería de iones litio quieren que dure una década. En BMW consideran que las baterías de iones litio tienen aún "un largo camino por recorrer". Aseguran que seguirán desarrollándolas largo tiempo, manteniéndolas presentes en sus coches eléctricos. Y a su vez desde la marca consideran que los modelos de BMW no necesitarán una batería de estado sólido hasta entrada la próxima década: concretamente en 2033, dentro de ocho años.
Así lo ha señalado a Autocar el vicepresidente de tecnología de baterías de próxima generación de BMW, Martin Schuster. Defiende que la tecnología de las baterías de iones litio "aún no está terminada" y que tienen margen de mejora. "La baterías de iones litio pueden mejorar de manera constante, para reducir su coste. Ese será nuestro objetivo principal, el más importante".
Por tanto, el precio es la principal razón para dilatar la llegada de las baterías de estado sólido a los coches eléctricos de BMW: "Ahora podemos fabricar baterías de estado sólido, pero el coste de producción no tiene sentido. Todavía queda un largo camino por recorrer con las baterías de iones de litio", explica.
BMW expone que "el precio es uno de los puntos más importantes para los compradores de vehículos eléctricos". Y que las baterías de estado sólido supondrían coches eléctricos bastante más caros para, por ahora, poca más autonomía respecto a las de iones litio. Defienden que su batería Gen6, que es de iones litio, "durará mucho tiempo" en el mercado.
Las baterías Gen6 de BMW prometen hasta 800 km de autonomía con una sola carga. BMW asegura que son un 30 % más eficientes que las que llevan ahora sus coches, con una densidad energética mejorada en un 20 % y capaces de cargar un 30 % más rápido: en una toma de alta potencia podrán insuflar cerca de 300 km en 10 minutos.
BYD lanzará su primer coche eléctrico con baterías de estado sólido en dos años
Las baterías de estado sólido llevan años sobre la mesa, con varios fabricantes metidos en la carrera por tenerlas. Además de BMW también lo está haciendo Toyota o Mercedes-Benz. Pero ninguno se ha lanzado todavía a su producción en serie para equiparlas en sus coches.
La de la estrella ha anunciado que ya ha comenzado a probar la suya, que promete más de 965 km entre cargas. BMW considera que quizá Mercedes-Benz se está precipitando, ya que estas baterías "están en un rango de precios que no es competitivo".
No obstante, las marcas chinas son mucho menos conservadoras. En este aspecto es clave que dominen toda la cadena de valor del coche eléctrico, lo que abarata el coste de producción incluyendo las propias baterías.
BYD puede convertirse en la primera marca en empezar a vender coches eléctricos con baterías de estado sólido: quiere equiparlas solo dos años. En 2027 las comenzará a incorporar en producción aún limitada en algunos modelos. Y desde 2030 comenzará su fabricación a gran escala.
No obstante, mantendrá las de iones litio o las LFP: las seguirán equipando sus modelos más baratos, mientras que las de estado sólido las equiparán sus coches de alta gama. Esto da pues la razón a BMW, cuando menciona que es una tecnología cara, y por tanto rentable en modelos menos asequibles.
Pero por otro lado los BYD de corte premium son precisamente los rivales naturales de los modelos de BMW o Mercedes. Sirve de ejemplo la berlina coupé BYD Han, con más de 600 km de autonomía y 517 CV de potencia, que arranca en 69.990 euros. Por potencia y autonomía su rival es el BMW i4, de 544 CV, que parte de los 80.550 euros con un rango más comedido (519 km).
BYD no es la única china que quiere pisar el acelerador con estas baterías: el primer fabricante de baterías del mundo, CATL, espera tenerla lista pronto. Y MG también ha asegurado que producirá baterías de estado sólido en masa desde el año que viene. De hacerlo, incluso le ganaría la partida a BYD. Veremos si la postura conservadora de BMW no deja atrás a la marca.
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Imágenes | BMW, BYD
