El sistema de precarga de frenos es un sistema actualmente en evaluación para su posible uso en los coches de calle, aunque como sucede a menudo con la transferencia tecnológica de la Fórmula 1 a los coches , se ha tenido que reinterpretar el concepto.
En los monoplazas de Fórmula 1, las elevadas fuerzas G que implica el paso por los pianos de muchos circuitos hace que las pastillas de freno se puedan separar del disco, generando una importante reducción en las sensaciones y las prestaciones durante la frenada.
Para evitarlo, los Ferrari de Fórmula 1 poseen un sistema de precarga que acerca la pastilla hacia el disco antes que se aplique la presión de frenado al pisar el pedal. El control de este sistema en F1 es mecánico, pues no se permite el control electrónico.
En los coches de calle, el concepto es bien distinto, ya que no tenemos que pasar por pianos, pero la precarga del sistema de frenado puede suponer un incremento de la eficiencia de frenado considerable.
De este modo, y aprovechando una función ya existente en el sistema de Bosch, que sirve para generar una ligera presión de las pastillas contra el disco para secarlo en caso de lluvia, Ferrari solicitó a Bosch cambiar esta misma función para que “tan pronto como se suelte el gas, el sistema genere una presión para poner las pastillas en ligero contacto con el disco, de manera que haga el sistema mucho más eficiente”.
Vía | Automotive Testing Technology International
En Motorpasión | Transferencia de tecnología de la F1 a la calle: el caso Ferrari