Los coches cada vez tienen menos mandos tradicionales: muchos ya fían casi todo a la pantalla, o bien han sido sustituidos por mandos hápticos. Volkswagen no es una excepción, pero en sus nuevos modelos esta tendencia va a cambiar. Al menos en lo que toca a los botones, no botones, hápticos.
"Han causado mucho daño. Tenemos clientes frustrados que no deberían estar frustrados", ha señalado Thomas Schäfer en una entrevista a Autocar. El actual CEO de Volkswagen carga contra su antecesor y esta moda, que redefinió los interiores de los coches de la marca con Herbert Diess en el cargo.
Por ello, la marca germana va a volver a los botones físicos, prescindiendo de los hápticos de los últimos años, comenzando por la nueva generación del Volkswagen Tiguan, que está al caer. Pero también en sus coches eléctricos.
Adiós a los mandos hápticos y los tan frustrantes de la climatización
En los Volkswagen de última factura, los mandos de climatización no destacan por su utilidad: se trata de unos accionadores hápticos que están diseñados para deslizar sobre ellos el dedo y así ajustar la temperatura. También pueden pulsarse, pero al no ser un botones tradicionales, no es que sea muy intuitivo. Para colmo, no van retroiluminados.
Estos mandos han sido criticados y con razón. A lo que se añade que muchas funcionalidades ya sólo se manejan desde el display de turno. Así, Volkswagen está trabajando en interiores más funcionales y que no supongan un peligro para el conductor en lo que toca a distracciones.
Primero la funcionalidad, luego el diseño. Schäfer asegura que han dedicado mucho tiempo a definir cuáles son los mandos más utilizados por los clientes y que, por tanto, deben ser fáciles de activar.
"Los clasificamos. ¿Cuáles son los más importantes? ¿Cuáles necesitan ser botones? ¿Cuáles tienen que ir en la pantalla? Y luego el mando en sí, si debe ser un botón o un interruptor. Y sobre ello trabajar posteriormente en el diseño. Una nueva dirección que se agradece: que el diseño no condicione la usabilidad.
Pero esto no quiere decir que vayan a llenar los interiores de mandos físicos: estarán los esenciales: "Cuando haces botones, es mejor hacer pocos botones. Pero botones realmente útiles, como un avión".
No en vano, el nuevo Tiguan tendrá pantallas. Dos, para ser exactos: instrumentación y display. Y serán generosas. Lo que significa que desde la pantalla también se configurarán funcionalidades.
Pero por lo adelantado por Schäfer se entiende que las más recurrentes, volverán a accionarse desde botones tradicionales, empezando por la climatización. Y también ha confirmado que los mandos del volante igualmente dejarán de ser hápticos o que la consola central tendrá ruletas para configurar los modos de conducción o el volumen.
Coches regresando a botones tradicionales
El objetivo por tanto de Volkswagen es dar con la tecla, y nunca mejor dicho, con el interior del Tiguan. Y replicarlo en próximos lanzamientos, como la actualización del Golf o la nueva entrega del Passat, que se desvelarán a finales de este año.
También para los nuevos eléctricos: el anunciado Volkswagen ID.2all dejará de tender al habitáculo minimalista sin mandos tradicionales de los Volkswagen ID.3 o Volkswagen ID.4, en los que los botones son mínimos y además hápticos.
El regreso a los mandos físicos no es sólo cosa de Volkswagen. Marcas como Hyundai han asegurado que seguirán presentes en sus coches. Sirve de ejemplo el nuevo Hyundai Kona, que pese a su enorme pantalla curva panorámica cuenta con muchos botones tradicionales bajo ella o en el túnel central. También hay botones físicos en modelos como el Ioniq 5 o el Ioniq 6.
Y otra directamente nunca se han subido al barco de los botones hápticos o en fiar todas las funcionalidades a la pantalla: es el caso de Mazda, que siempre las ha criticado por ser muy susceptibles de provocar distracciones.
En el polo opuesto, encontramos no pocas marcas, con Tesla a la cabeza, con interiores sin botones al completo. Pero no es la única, por ejemplo la china Aiways también fía todo al display en el U6 y Mercedes-Benz apuesta por que las pantallas lo inunden todo. Y sin ir más lejos, el actualizado Range Rover Evoque, recién desvelado actualizado va muy en sintonía de los Tesla, con ningún botón tradicional en la ecuación.