Tranquilos, que esto no es una inocentada. Con la de ayer y la que nos regaló Volkswagen ya tuvimos suficiente.
Ver quemar ruedas a base de pedal a un clásico americano es algo que tenemos ya bastante visto, pero no tanto si el que quema las ruedas es un pequeñín como el Fiat 500. El motor Chevy V8 se ha transplantado a la parte delantera, ya que atrás, el espacio no sería suficiente ni para uno de los dos bancos. Eficaz no se, pero divertido de conducir debe ser un rato largo…
¿Será este el secreto de Felipe Massa?
Vía | Autoblog.nl