Los hiperdeportivos de altos vuelos no están al alcance del bolsillo de la mayoría de los mortales, pero hay quien le pone remedio vistiendo a coches más asequibles con su traje. Es el caso de este Pontiac Fiero cuya carrocería ha mutado para imitar las formas de todo un Ferrari Enzo y que se vende al mejor postor en la plataforma de subastas Cars & Bids.
Corría el verano de 2015 cuando los los chicos del canal de Youtube CAR BROS compraron en eBay este Pontiac Fiero aspirante a Enzo: "bien podía ser el coche más estúpido y a la vez divertido que había visto nunca". Y ni cortos ni perezosos, cuatro años después, pensaron que sería una buena idea llevarlo a la Quail Motorsports Gathering enmarcada en la Monterey Car Week. "Un Ferrari Enzo, ¿de verdad?", la organización del evento no daba crédito.
Y la verdad es que esta aberración vestida en fibra de vidrio y que invita a arrancarse las córneas ha sido todo un filón: se llevó el primer premio en el Concours d'Lemons the World's Worst Car Show y también ha tenido su hueco en Jay Leno’s Garage. Pero parece que CAR BROS considera que ya no pueden explotarlo más, así que lo han puesto a la venta a través de este portal de subastas online.
No sorprende que, en momento en el que se escribe este artículo, atesore únicamente 12 pujas, siendo la más alta de 4.500 dólares, unos 3.750 euros al cambio.
Barra libre de defectos y averías
Lo cierto es que el Pontiac Fiero ha servido durante años como base de modificaciones para vestir el traje de superdeportivos italianos como por ejemplo el Lamborghini Countach o el Ferrari F40. Y en la mayoría de los casos, se trataba de trabajos muy bien realizados.
Por el contrario, el apodado como Fierri, se postula como el paradigma del "todo mal". Paneles mal alineados y de formas cuestionables, remaches a lo largo y ancho de su fisonomía, cuatro salidas de escape que parecen dientes que piden a gritos unos brackets y la guinda: una cutre reproducción del propulsor V12 del Enzo al que le faltan "cilindros" (Mock V12, lo bautizan).
Por supuesto, este Fierri cobra vida gracias al motor que esconde bajo el capó, un L44 V6 de 2.8 litros que rinde 142 CV y 230 Nm, muy alejado de los 660 CV del Enzo. Y a ello se suma que, como reza en su ficha, no ha pasado los test de emisiones que exige el estado de California (sus niveles de NOx se pasan de frenada), por lo que quien lo compre no podrá circular con él a menos que le ponga remedio.
Pero sus pormenores no terminan ahí: las luces de los faros y los intermitentes no funcionan, el "portón" trasero no cierra, el mecanismo que abre sus puertas de tijera "no es fiable", varios de sus paneles están arañados y oxidados, y, además, su kilómetraje apunta a ser superior a las 148.873 millas (cerca de 239.588 kilómetros) que muestra el odómetro. "Quien sabe cuántos puede tener".
Pese a ello, ha sido puesto a punto por CAR BROS, que le han hecho unas 1.000 millas (unos 1.600 kilómetros) desde que llegara a sus manos. Los filtros son nuevos y han reemplazado las bujías, los filtros o la tapa del motor. Además han añadido líquido de frenos y refrigerante, han limpiado los inyectores y añadido un nuevo catalizador.
Sea como fuere, busca nuevo dueño y dado que hay pujas activas, alguien va a atesorarlo en su garaje en cosa de dos días, que es cuando se cierra la subasta. Ver para creer.
En Motorpasión | Cuánto más bestia, mejor: Mercedes-Benz Funmog, el enorme e industrial Unimog pensado para salir de marcha
