El nuevo Toyota Mirai ya está aquí. Tras ver un anticipo en formato concept en octubre del año pasado en el marco del Salón de Tokio, la segunda generación del coche de hidrógeno (FCEV) para Europa ya ha sido presentada de forma oficial. Llegará al mercado a finales de este año.
Se trata de un modelo que prácticamente calca el diseño visto en el prototipo, apostando por un estilo más agresivo con líneas más afiladas, una prominente parrilla que evoca a la del Toyota Camry y una zaga que integra los pilotos prolongados hacia abajo por los costados con un nervio. Estos además están conectados entre sí al estilo, por ejemplo, del Kia Stinger.
En cuanto a sus dimensiones, estamos ante una berlina que conserva las cotas anticipadas: 4,97 metros de largo, 1,89 de ancho y 1,47 de alto con 2,92 metros de distancia entre ejes. Esto son casi 10 cm más de largo, 8 cm más ancho y 8 cm más bajo que el modelo actual, de ahí su notable cambio estético. En suma, el Toyota Mirai 2020 presenta una carrocería elegante apuntalada con unas llantas de 20 pulgadas.
Pero más allá de la notable actualización exterior, otro aspecto interesante es la mejora que se ha logrado en su rendimiento, concretamente en su autonomía. Según explica la marca nipona, el nuevo Toyota Mirai cuenta con un rango estimado de 500 kilómetros en ciclo WLTP, lo que supone "una mejora del 30%" con respecto al modelo saliente, en palabras de la compañía.
Dicha optmización de autonomía de la que habla Toyota ha sido posible gracias a un sistema de celdas de combustible mejorado y el uso de tanques de hidrógeno más grandes. Ahora hay tres depósitos, uno largo y dos cortos, que en conjunto aumentan la capacidad en aproximadamente un kilogramo de hidrógeno en comparación con el modelo actual. El tiempo que conlleva el repostaje con esta tecnología oscila entre los 3 y 5 minutos, similar al de un vehículo de combustión convencional.
Cabe recordar que la primera generación de este coche eléctrico de pila de combustible, la cual tuvimos oportunidad de probar, homologaba los mismos 500 km, pero acogiéndose al caduco y más condescendiente protocolo NEDC.
Otra interesante novedad es que ahora el Toyota Mirai es un coche apto para hasta cinco pasajeros, una capacidad que en la generación actual se queda limitada en cuatro asientos debido a que la pila de combustible situada en medio del chasis implica la presencia de un imponente túnel central.
Todo ello ha sido posible gracias a la plataforma modular TNGA sobre la que se monta el nuevo Mirai, que acogerá un tren de motriz de tracción trasera, aunque por el momento no se han revelado más especificaciones. La estructura sobre la que se asienta el coche está diseñada además para acomodar diferentes sistemas de propulsión, y le concede un mayor grado de rigidez.
En cuanto al habitáculo, el Toyota Mirai 2020 alberga una doble pantalla digital en disposición horizontal -la central es de 12,3 pulgadas- orientada al puesto de conducción, en lugar del bloque vertical ubicado en mitad del salpicadero del modelo lanzado en 2014.
Un coche prometedor en un contexto por halagüeño
"Quiero que los clientes digan 'Elegí el Mirai no solo porque es un FCEV, sino porque simplemente quería este coche y resulta ser un FCEV". Con este prefacio, Yoshikazu Tanaka, el ingeniero jefe del Toyota Mirai, confía en un futuro halagüeño para un modelo que en el lustro que lleva en el mercado ha conseguido vender unos 10.000 ejemplares pese a su elevado precio y a una infraestructura sin consolidar y sin un plan de desarrollado estructurado.
En España, actualmente solo se vende un modelo de hidrógeno, el Hyundai Nexo, que parte de los 72.250 euros, lo que explica que únicamente se registrase una matriculación de un ejemplar de estas características en 2019 en nuestro país.
Además, únicamente contamos con tres hidrogeneras operativas y otras cuatro proyectadas, según los datos del Centro Nacional del Hidrógeno. Y aunque España es uno de los reflejos más fehacientes de la escasa infraestructura, el problema es global en el Viejo Continente.
Alemania, el país puntero en número de hidrogeneras, cuenta con solo 60 instalaciones públicas y le sirven para situarse en el segundo escalafón del ránking mundial entre Japón (96 estaciones públicas ) y EEUU (42), según los datos arrojados en los mapas interactivos de la web alemana H2stations.
Sea como fuere y a pesar de una coyuntura poco propicia para el desarrollo de esta tecnología, Toyota no se rinde y desvelará más información en los próximos meses sobre el nuevo Mirai, como lo relativo a su tren de propulsión, precios o los mercados concretos a los que llegará. Su lanzamiento, no obstante, está programado para finales de 2020 en Japón, Norteamérica y Europa.
