Se ha quedado sin su marca y sin 14.000 euros: el propietario de un pequeño restaurante de comida para llevar se ha enfrentado a Tesla y no le ha salido bien precisamente. Y es que decidió registrar el nombre de su negocio con Tesla en la ecuación.
Según la firma californiana, este establecimiento se estaría aprovechando de su ya ganada reputación como marca internacional. El dueño se embarcó en una batalla legal infructuosa: la justicia le ha dado la razón a Tesla. Habría recurrido, pero no podía asumir perder más dinero en esta liza.
David contra Goliat = 12.000 libras menos
Ahora su restaurante de Buri (Gran Manchester) se llama Colorado's Chicken, pero cuando registró su marca en mayo de 2020 era 'Tesla Chicken & Pizza'. Amanj Ali, el propietario en cuestión, escogió el nombre por la misma razón que Tesla lo hizo en su momento: en honor a Nikola Tesla, el famoso inventor e ingeniero.
Ali registró como marca 'Tesla Chicken & Pizza' ante la Oficina de Propiedad Intelectual (IPO por sus siglas en inglés) en la categoría de alimentos y bebidas. Algo que a priori no tiene mucho que ver con Tesla o eso pensó en su momento. De hecho nada objetó la de Palo Alto durante el periodo habitual para recurrirlo, que es de dos meses.
Pero en noviembre de 2021, recibió una notificación de este organismo: Tesla había solicitado que se invalidara su marca. Ali se negó y empezó su vía crucis contra la firma de coches eléctricos: la IPO dio la razón a Tesla y exigió a Ali una indemnización de 4.000 libras. En la disputa legal, ya se había dejado 8.000 libras. En total, esta batalla contra Tesla le ha costado 12.000 libras, unos 14.000 euros al cambio actual.
¿Restaurantes Tesla de comida rápida? El argumento esgrimido por la compañía de Elon Musk, y que aceptó la IPO, se centró en proteger a Tesla como marca registrada asociada al negocio de la alimentación. Todo basado en un tuit publicado por Elon Musk allá por 2018.
Gonna put an old school drive-in, roller skates & rock restaurant at one of the new Tesla Supercharger locations in LA
— Elon Musk (@elonmusk) January 7, 2018
En este dejaba caer su intención de abrir un restaurante drive-in bajo la marca de Tesla con autocine incluido y, por supuesto, equipada con Supercargadores de la firma. Esta línea de negocio aún no ha sido explotada por la marca de coches, ni en EE.UU. ni en ningún otro país, pero con el movimiento conseguía protegerla en Reino Unido.
Es más, Tesla hasta le acusó de querer vender la marca por 750.000 libras. Ali alega que esto es falso y que se malinterpretaron sus palabras: Tesla le ofreció en un primer momento una compensación de 750 libras y él trasladó a su abogado que consideraría la oferta si añadía tres ceros a esta cifra.
"Nunca pensé: 'Un día voy a vender mi marca a Tesla'. Si tuviera la intención de vendérsela, habría comprado sólo la palabra Tesla", ha asegurado, según recoge la BBC.
Sea como fuere, Ali ha tirado la toalla. Principalmente porque no puede asumir más costes derivados de esta disputa contra la multinacional norteamericana. Pero también para curarse en salud: "Para ser honesto, no podía dormir bien... a veces no podía trabajar. Imagínese, soy sólo un pequeño empresario que dirige un restaurante de comida rápida y viene una gran empresa propiedad del hombre más rico del mundo".
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Imagen: Motorpasión generada con IA Stable Diffusion.