Elon Musk siempre ha estado a la gresca con los inversores cortoplacistas. De hecho fue la razón por la que quería sacar a Tesla de bolsa hace seis años. Bill Gates, dueño de Microsoft, lo ha hecho en un pasado y parece que lo sigue haciendo. Así que Musk ha vuelto a cargar contra él.
Y lo ha hecho al más puro estilo Musk: señala que Gates "será aniquilado" como el resto de cortoplacistas cuando Tesla lo reviente con sus robots autónomos y mejore la autonomía de sus coches eléctricos.
Gates estaría ganando dinero con la caída de valor de Tesla, mientras Musk lo pierde
Como Elon Musk, Billy Gates es uno de los hombres más ricos del planeta: uno el segundo y otro el séptimo, según Forbes. Pese a ser en teoría rivales, tuvieron acercamientos para trabajar en proyectos juntos, pero esa colaboración se fue al traste cuando el sudafricano descubrió que el de Microsoft invertía a corto en acciones de Tesla.
Así lo contó en su reciente biografía publicada por Walter Isaacson: Gates invirtió nada menos que 500 millones de dólares en acciones en corto de la marca de coches eléctricos. Eso indignó a Musk, que rompió con Gates. "Lo siento, pero no puedo tomar en serio su filantropía sobre el cambio climático cuando tiene una posición en corto masiva contra Tesla, la compañía que más está haciendo para resolver el cambio climático", le dijo entonces Musk a Bill Gates.
Esto ocurrió en 2022 pero, por lo recién declarado por Musk, parece que Gates mantiene estas inversiones. Contestando a un analista en Twitter que metía el dedo en la llaga con los cortoplacistas, Musk ha sido meridiano: "Una vez que Tesla resuelva completamente la autonomía y tenga Optimus [su robot autónomo] en producción en serie, cualquiera que todavía mantenga una posición en corto será aniquilado. Incluso Gates".
De esto se deduce que Bill Gates sigue especulando con acciones de Tesla a corto. Esta estrategia se basa en "alquilar" acciones y venderlas inmediatamente para sacar beneficio si estas bajan de valor al recomprarlas y devolvérselas al propietario inicial.
De ser así, Gates se puede estar endosando un buen dinero, ya que Tesla ha bajado de valor en bolsa en los últimos meses: cerca del 30 % desde diciembre. La situación de la marca no apunta a mejorar a corto plazo, valga la redundancia, tras un primer trimestre en el que sus ventas han caído por primera vez en cuatro años.
Pero Musk opina que el nuevo rumbo de Tesla dará la vuelta a la situación y catapultará aún más a la marca con sus dos nuevos negocios: el robot Optimus y los robotaxis. Es más, presumió antes sus accionistas de que Tesla podrá llegar a valer 32 billones de dólares gracias a ambos. Esta ambiciosa cifra multiplicaría por 10 la actual de precisamente Microsoft, que se fija en 3,29 millones de dólares.
La estimación de Musk se basa en un informe de Cathie Wood’s ARK Invest Management, que augura un crecimiento de hasta 3.100 dólares por acción de Tesla en 2029. Lo hará fundamentalmente gracias al robot Optimus: con cada unidad la marca se cree que se va a embolsar 10.000 dólares de beneficio. Y dado que prevé que va a vender 100 millones de estos robots al año, sumarían al valor de Tesla entre 20 y 25 billones de dólares.
Pero este robot tardará en llegar al mercado. En principio se lanzará a finales de 2025 en producción limitada y con destino a las fábricas de Tesla: cerca de 1.000 harán las veces de operarios. De momento esta previsión se vio con recelo en general, pues sus acciones bajaron un 2 % tras la junta.
Hay que tener en cuenta además que la compensación millonaria recién aprobada que recibirá Musk está supeditada al valor de la compañía: si bien se fijaba en 56.000 millones de dólares ha pasado a 50.000 millones (unos 46.500 millones de euros al cambio actual). Mientras, Gates estaría ganando dinero gracias a su fluctuación a la baja.