Si desde que viste los Dodge Charger y Challenger Hellcat has soñado con tener su motor 6.2 litros V8 en el salón de casa para amenizar comidas familiares, o bien querías montarlo en el clásico que guardas en el garaje, estás de enhorabuena. Mopar ya lo vende a la carta como 'crate engine'.
La firma de FCA ha anunciado la comercialización "por separado" de este salvaje motor de ocho cilindros denominado Hellcrate con ocasión del SEMA Show de Las Vegas. ¿Y para qué? Pues porque en Estados Unidos es habitual montar motores modernos en coches clásicos o preparaciones, ya que legalmente no supone un quebradero de cabeza como en España.
Disponible desde 21.725 dólares (unos 18.670 euros al cambio), incluyendo el propio motor (19.530$) y el kit eléctrico (2.195$), este 6.2 litros V8 es un "plug & play" y está optimizado para ser acoplado a cajas de cambio manuales. Además, según Mopar el motor está pensado para ser instalado en coches anteriores a 1976, de carretera o bien todoterrenos.
Por ese precio se incluye, además del propio bloque, la bomba de agua, embrague y volante de inercia, cárter, colector de admisión, inyectores o bobina. Por su parte, el kit "eléctrico" cuenta con módulo de gestión electrónica del propulsor ajustado para esos 717 CV, cableado, módulo de control de la bomba de gasolina, pedal del acelerador o diversos sensores. Además, un kit denominado Front End Accessory Drive suma elementos como un alternador, bomba de la dirección asistida y correas.
Para mostrar las posibilidades de este motor 6.2 litros V8 sobrealimentado por compresor, Mopar exhibirá en Las Vegas diversos vehículos equipados con el mismo, destacando sobre el resto un Plymouth Superbird de 1970 con caja de cambios manual de seis marchas, creado por el equipo del programa de televisión Graveyard Carz.
Un repaso técnico
Como ya sabíamos, este HEMI V8 de tercera generación tiene una cilindrada de 6.161 centímetros cúbicos (376 pulgadas cúbicas). El bloque está fabricado en hierro fundido, el cigüeñal en acero forjado, las bielas tiene un recubrimiento diamantado y los pistones son forjados, por ejemplo.
Con un régimen máximo de 6.200 RPM, no es precisamente un V8 de giro rápido (está sobrealimentado), ni tampoco es un motor de los llamados "cuadrados", sino de carrera corta, ya que tiene una carrera de 90,9 milímetros y un diámetro del cilindro de 103,9 milímetros. Ahora bien, con un par máximo de 881 Nm, va sobrado de fuerza bruta.