La prestigiosa marca Rolls-Royce quiere ampliar su número de ventas hasta llegar a las 2.000 unidades al año, sin embargo con su gama actual no lo ven posible y estarían pensando en la creación de un nuevo modelo de entrada de gama.
Claro que el término entrada de gama siempre es relativo a la marca, y en Rolls-Royce significa un precio de entre 220.000 y 250.000 euros, aún así sigue siendo más económico que el Rolls-Royce Phantom (unos 90.000 euros menos).
En 2008, se espera que las ventas de Rolls-Royce se amplíen gracias a nuevos mercados como China, que ya se ha convertido en el segundo más importante para la marca por detrás de Estados Unidos, superando así al Reino Unido, su país de procedencia.
Vía | autoblog.it