Los más freakys de esto de los coches, muchas veces se preguntan cual será el último coche que prueben. Suele ser el coche fúnebre que se encarga de tu último viaje. Y a algunos le gustará hacer ese último viaje con el máximo confort y elegancia, aunque no vayan a poder disfrutarlo.
Para ello se ha creado este Rolls-Royce Phantom fúnebre, que toma como base la lujosa berlina del Grupo BMW para adaptarlo al especial confort que necesitan sus pasajeros. Se ha alargado la batalla tanto que es considerablemente más largo que la versión larga del Rolls-Royce Phantom.
Mantiene la fila trasera de asientos, mientras que el difunto pasajero irá dentrás de ellos en un compartimento especialmente diseñado para ello. Así los familiares pueden acompañarle en todo momento. El acceso a las puertas traseras mantiene también la apertura de las puertas hacia atrás.
Evidentemente no se trata de un modelo desarrollado por Rolls-Royce, sino que los creadores han sido los carroceros de Biemme Special Cars.
Su precio es caro, en torno a los 500.000 euros. Pero estoy seguro de que en zonas de nivel adquisitivo alto sus servicios serán muy demandados. Después de su presentación en el Salón Fúnebre de Bolonia, seguro que ya han recibido los primeros pedidos.
Vía | GT Spirit