Evoluciona más que revoluciona, pero hacia un estilo más refinado de lo que habíamos imaginado. El Bentley Continental GT 2018 ha irrumpido con fuerza y ha dejado claro que los de Crew se han esmerado: el gran tourer definitivo se ha renovado, bebiendo de la inspiración del aire y del mar.
Bentley ha querido desvelar los detalles del proceso creativo y de fabricación del Continental GT y nos da las claves: el avión Spartan Executive inspira la curvatura que fluye enmarcada por las líneas agudas y atemporales, y un centenar de horas de trabajo se ven reflejadas en un interior cosido a mano, puntada a puntada.
Un avión de lujo de los años 30
El Spartan 7W Executive fue el avión más popular y conocido de los fabricados por la Spartan Aircraft Company al final de la década de los años 30, aunque solo se construyeron 34 unidades. Fue fabricado completamente en metal (10.000 horas de trabajo) y con el tren de aterrizaje retráctil, características que marcarían tendencia en la industria aeronáutica del momento.
Estaba pensado para una clientela acomodada, y recibió pedidos de millonarios de todo el mundo. En su pionero interior, los asientos disponían de reposabrazos, ceniceros y una tapicería compuesta por mullidos cojines para cinco pasajeros. Hoy en día solo quedan 24 unidades, y su precio se sitúa por encima de los 300.000 euros restaurado.
Bentley ha querido que el nuevo Continental GT bebiera de este lujo de antaño y sus artesanos se han esmerado en cada detalle.
La firma británica empleó la misma filosofía en el nuevo Continental GT, utilizando la tecnología Superforming, una técnica de precisión que trabaja con aluminio calentado a 500 °C, lo que permite a los diseñadores invocar líneas de cuerpo más complejas y definidas y un músculo más profundo y esculpido. El Continental GT es el primer automóvil de producción que tiene un lado del cuerpo entero fabricado con el proceso de superformado.
1.000 artesanos y 100 horas para el interior
La sede de la compañía en Crewe, Inglaterra, es el hogar de todas sus operaciones, incluyendo diseño, I+D, ingeniería y producción de las cuatro líneas modelo de la compañía: Continental, Flying Spur, Bentayga y Mulsanne. Aquí, 1.000 artesanos han invertido una media de 100 horas en terminar cada interior del Continental GT.
El acabado Côtes de Genève que se encuentra en relojes mecánicos inspiró la creación de un nuevo acabado interior para el Continental GT. El acabado 'diamond in diamond' tiene un efecto de superficie acolchada flotante en un mar de cuero. Se dedicaron 18 meses a desarrollar el bordado, optimizando y programando individualmente la alineación exacta de cada una de las 712 puntadas que componen cada forma de diamante.
Bentley ha creado además una pantalla giratoria de tres caras en el centro del salpicadero, que a primera vista se esconde. En su lugar, la chapa fluye sin interrupción a través del salpicadero, mientras que un delgado marco cromado detrás del volante rodea el instrumento digital.
Cuando se presiona el botón de arranque del motor, la chapa en el centro del salpicadero se desliza silenciosamente hacia delante y gira para revelar la pantalla táctil más grande de Bentley, una pantalla MMI digital de 12,3 pulgadas. El tercer lado de la pantalla giratoria revela tres discos analógicos que muestran la temperatura exterior, una brújula y un cronómetro.
La tercera generación de la joya de la corona de Bentley, que se presenta en unos días en Frankfurt, monta un motor 6.0 litros W12 biturbo. Una versión mejorada del anterior que ahora se combina con una caja de cambios de doble embrague y siete velocidades, y consigue 635 CV y 900 Nm.
