Aunque Dodge anunció a bombo y platillo que su nuevo Challenger SRT Demon era el primer coche de producción en rebajar la barrera de los 10 segundos en el cuarto de milla (0-400 metros), lo cierto es que ya había modelos en el mercado capaces de despachar esta aceleración en el entorno de los nueve segundos, como el trío de hiperdeportivos de McLaren, Ferrari y Porsche, por ejemplo.
Aún así, este 'demonio' americano es capaz de batir a todos los grandes supercoches de los últimos años en aceleración de 0 a 100 km/h, con un tiempo que ronda los 2,5 segundos (2,3 segundos de 0 a 96 km/h -60 mph-). Que sepamos sólo hay un modelo de producción más rápido, el Tesla Model S P100D, así que todo lo demás es más lento...o igual de rápido. De momento no se han ofrecido cifras independientes del Demon, así que comparemos cifras oficiales declaradas por sus brutos rivales.
Porsche 918 Spyder (2,6 segundos)
Aunque están todos vendidos desde hace bastante tiempo, como sus competidores de Italia y Reino Unido, el Porsche 918 Spyder es uno de los hiperdeportivos más rápidos del mundo, con una aceleración de 0 a 100 km/h de 2,6 segundos -según el fabricante- gracias a su sistema de propulsión híbrido que combina un motor 4.6 litros V8 con uno eléctrico, para un total de 887 CV y 1.275 Nm. Eso sí, algunos organismos independientes han conseguido cifras de 2,2 segundos en el 0-100 km/h. Impresionante.
McLaren P1 (2,6 segundos)
Otro hiperdeportivo híbrido, aunque en este caso procedente de Woking, en Inglaterra. El McLaren P1 también combina un poderoso motor V8 (aunque biturbo y de 3.8 litros) con un sistema eléctrico. El resultado es una potencia combinada de 916 CV y un par máximo de 900 Nm. Suficiente para arrancar el asfalto al acelerar.
Ferrari LaFerrari (2,7 segundos)
Nissan GT-R Nismo (2,7 segundos)
Lamborghini Aventador SV (2,9 segundos)
Bonus: Bugatti Chiron (2,5 segundos - ¡calcado!)
Vale, el Bugatti Chiron no es más lento que el Demon, pero despachan el 0-100 km/h en el mismo tiempo, así que está bien mencionarlo. Probablemente la diferencia es que el Bugatti, con su motor de dieciséis cilindros, cuatro turbos y 1.500 CV, en 4 segundos más ya está a 200 kilómetros por hora y sigue empujando por encima de los 400 km/h. Menuda bestia.
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