El Kimera EVO37 firmado por la italiana Kimera Automobili, es uno de esos proyectos capaces de emocionar a cualquiera petrolhead de bien, no solo a los más románticos.
Y es que, además de estar inspirado en uno de iconos del mundo de los rallies de la década de 1980 como es el legendario Lancia 037, la pasión con la que ha sido concebido lo hace realmente especial.
Hace apenas cinco años apenas era un sueño para un grupo de aficionados a las carreras (con el ex piloto Luca Betti a la cabeza) y los primeros teaser llegaron hace dos. Hoy, la segunda unidad de las únicas 37 que se fabricarán jamás, ya está en manos de su propietario en España.
El resto, ya se han convertido en un objeto de deseo inalcanzable para los amantes de los clásicos y la competición.
Equilibrio perfecto entre elegancia, deportividad y pasión
Paula KIMERA Automobili
El espectacular Kimera EVO37 número 002/037 que protagoniza este post ha sido bautizado como ‘Paula’, como la nieta de su propietario, Teo Martín, fundador de las instalaciones del Motor & Sport Institute (MSi) en Madrid: un centro de 12.000 m2 único en el mundo de la competición, dedicado a formación, tecnología, innovación y deporte de alto rendimiento.
Además de ser empresario y dirigir el centro, Teo Martín es un ex piloto de rallies amante de los coches que llegó a competir con un Lancia 037, posee su propia escudería y una colección única en nuestro país, que precisamente se ubica en el MSI y que reúne casi un centenar de los coches más emblemáticos del mundo de la competición.
A ellos se une ahora ‘Paula’. Este Kimera EVO37 en concreto es un restomod en el que se ha hecho un trabajo de diseño e ingeniería brutal, pues nace de la base de un donante del calibre de un Lancia Beta Montecarlo de calle con chasis tubular autoportante y añade algunos elementos del Delta S4. El resultado salta a la vista.
La preciosa carrocería de este EVO37, hecha al detalle y vestida de un característico y atractivo tono rojo es muy similar en diseño a la del Lancia 037 Stradale original. Al menos así nos lo recuerdan elementos como la delgada parrilla flanqueada por las ópticas redondas bifaro o el afilado alerón integrado en la carrocería, aunque más prominente.
Las cotas del Kimera EVO37 son 4,05 m de largo, 1,90 m de ancho y 1,20 m de alto, siendo ligeramente más largo y ancho que el 037, y un poco más bajo. No obstante, sus formas son algo más redondeadas e incluye materiales como el kevlar, el aluminio o la fibra de carbono, que queda a la vista en algunos elementos de su carrocería como el difusor trasero o los retrovisores. Su coeficiente aerodinámico es de 0,50 Cx, según el fabricante.
En el habitáculo del 002/037 abundan los acabados en fibra de carbono, antracita y Alcantara, además de los exquisitos detalles en color rojo. Llaman la atención los guiños a su propietario, como la placa que reza "Automóvil orgullosamente construido en Italia con pasión y afecto para Teo Martín" en el umbral de la puerta o el nombre de su nieta.
En cuanto a su corazón, ‘Paula’ cobra vida gracias a un bloque también muy similar al del 037. Se trata de un propulsor central trasero que ha sido rediseñado y concebido por Italtecnica con Claudio Lombardi a la cabeza, el ingeniero que firmó los motores de los Lancia de rallies.
"El motor es la gran diferencia frente a cualquier otro proyecto de este tipo, ya sean de origen Porsche, Alfa Romeo o Lancia", afirmaba Betti en una entrevista.
El de este Kimera 037 es un cuatro cilindros en línea con 2.0 litros, aunque gracias a un turbo y un compresor volumétrico, llega hasta los 505 CV y los 550 Nm de par. Toda su fuerza se transmite al eje trasero a través de un cambio manual de seis relaciones.
Además, lleva suspensión neumática ajustable con amortiguadores Öhlins, frenos de alto rendimiento firmados por Brembo, llantas de 18” en el eje delantero y 19” en el trasero (más grandes que las Lancia 037), así como otras tecnologías actuales como ABS deportivo, cámara de visión trasera y un largo etcétera.
Cuando se presentó al mundo, en la edición del Goodwood Festival of Speed que tuvo lugar en julio 2021, el Kimera EVO37 anunciaba un precio de partida de 480.000 euros. A eso hay que sumar entre otras cosas la personalización, por lo que es más que probable que varias unidades hayan llegado a superar la línea del medio millón de euros.
Y es que en Kimera se toman muy en serio la personalización de cada uno de sus retoños, y entre otras cosas, cada cliente puede incluir los detalles que quiera, y verlos a tamaño real gracias a un simulador de realidad virtual situado en Villa Kimera.
Las 37 unidades de la serie limitada -todas con nombre propio- se vendieron casi inmediatamente (uno de los primeros en hacerse con la suya fue Teo Martín) tras su presentación. Mientras, ¿tendrá Luca Betti otro proyecto en mente con el que hacernos soñar? Todo indica a que sí, por lo que estaremos muy atentos.