Lo hemos visto en infinidad de revistas. Lo hemos pilotado en 'Need for Speed'. Pero ver uno en vivo es misión imposible. Normal, el Isdera Commendatore 112i es un modelo único, que equipa el V12 Mercedes que más tarde animaría el Pagani Zonda.
El Commendatore 112i no tenía que ser un one-off. Estaba destinado a competir en las 24 Horas de Le Mans y a venderse en serie limitada, como otros hypercars de los años 90. Pero no fue así. La historia del Commendatore es también la de Isdera y de su fundador. Es una de esas historias que nos enseñan que siempre hay que luchar por sus sueños.
Isdera es uno de esos fabricantes artesanales creados en los años 80 que han dejado huella en el imaginario popular y que son algo más que una nota a pie de página en la Historia del Automóvil. Isdera alcanzó la cima a mediados de los años 90, cuando la clientela necesitaba algo más que un V8 para ser feliz, era el principio de la era de los hypercars y muchos no podían seguir el ritmo de inversión que eso implicaba.
Isdera y sus espectaculares creaciones salieron de la mente de Eberhard Schulz. Schulz no terminó su carrera de ingeniería, en cambio sí creó un coche desde cero, en el jardín de su casa, pensando que sería el mejor curriculum que podría enseñar a cualquier marca. Ese coche era un cruce entre un Marcos y un Ford GT40. En 1969, consiguió enseñárselo a los directivos de Mercedes-Benz y Porsche. Finalmente, lo contratarían en Porsche.
Este primer coche, posteriormente bautizado Erator GTE, contaba con dos señas de identidad de los Isdera: las puertas en alas de gaviota y el retrovisor periscopio, con el que Lamborghini nunca se atrevió a equipar el Countach, tal y como tenían pensado.
A partir de 1972, mientras está en Porsche, Schulz empieza a crear su deportivo soñado, el heredero del Mercedes 300 SL “Alas de Gaviota”. Casi al mismo tiempo, Rainer Buchman lleva preparando Porsche en un pequeño taller que montó en 1973 a las afueras de Fráncfort. El éxito, la fama y los pedidos le llegaron a Buchamn en 1976, cuando realizó un 911 Targa equipado con el motor Turbo del 930. Su carrocería blanca con franjas del color del arco iris, los colores de Polaroid, llamaron la atención en la feria de fotografía donde fue presentado.
A partir de entonces, desarrollaría modelos que Porsche no se atrevía a fabricar, como el 928 Targa o el 928 Cabrio. Pero Buchman quiere abrir mercado más allá de los Porsche. En 1977, Schulz se cansa de estar en el departamento de prototipos de Porsche, quiere dar vida a su coche y se une a Buchman. El coche soñado de Schulz, lo fabricaría B+B.
Mercedes CW311, el concept car que no conocían en Mercedes
En 1978 B+B presenta en el salón de Fráncfort un espectacular concept car bautizado CW-311 (por su coeficiente aerodinámico). Por supuesto, sus puertas son de tipo alas de gaviota. Bajo la carrocería de fibra de vidrio se esconde un chasis tubular con suspensiones de doble paralelogramo a las cuatro ruedas y un motor Mercedes-Benz V8 de 6.9 litros preparado por el entonces especialista independiente AMG que desarrolla 370 CV en lugar de los 286 CV de la versión “civil”. Con una velocidad máxima de 319 kmk/h, un 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y el 0 a 200 km/h en 12,7 segundos el coche fue la sensación de finales de los 70.
En junio de 1979, Niki Lauda probó el coche en el Salzburgring para Automobil Revue donde se comprobaron las prestaciones del CW311. Se aprovecharon las imágenes de la prueba para una película: 'Car-Napping', una suerte de “Gone in 60 seconds” a la alemana, donde también se puede ver el famoso 930 Targa de B+B “Polaroid”. Lo más curioso es que B+B presentó el coche con la estrella de Mercedes sin pedir la autorización a la marca, pero viendo el éxito del coche, los dirigentes de Mercedes no emprendieron medidas legales. Se limitaron a recordarles que si lo fabricaban en serie deberían quitar la estrella.
Ese mismo año, Schulz diseño los 928 Targa y Cabrio para B+B así como la famosa llanta Pirelli que Volkswagen usaría en una serie limitada de su Golf GTI. Para los que conocen la escena Volkswagen, esa llanta es como el Santo Grial de las llantas Vintage. Pero pocos meses después, Schulz deja B+B y pasa dos años diseñando el BMW Futuro, el Sauber C6 del grupo C y el carenado del WM-Kreidler.
Pero en los años 80, de nuevo se cansa de trabajar para otros y en 1982 decide instalarse por su cuenta. Crea Isdera, acrónimo germanoinglés de “Ingenieurbüro für Styling DEsign and RAcing”. Su primera creación es reinterpretar su diseño del CW311 en versión abierta. Nace el Isdera Spyder 033i.
Isdera Imperator y Spyder, la antesala del Commendatore
El Spyder 033i a pesar de su parentesco estético con los Mercedes de la época (grupos ópticos) era en realidad una reinterpretación del Porsche 550 Spyder. La ausencia de parabrisas se compensaba con la entrega de dos cascos integrales a juego con el color del coche y dos monos de competición impermeables. Eso sí, las puertas de apertura vertical no podían faltar.
Isdera proponía dos motorizaciones. Una era el 4 cilindros 1.8 litros del Golf GTI potenciado por Schrick a 136 CV o el 5 cilindros turbo de Audi de 200 CV. La caja de cambios de Porsche 924 Turbo era la misma para los dos motores. El 0 a 100 km/h en 6,8 segundos puede parecer modesto, pero sin parabrisas y con un chasis cuyo reparto de peso es de 50/50 las sensaciones debían ser muy reales y nada modestas.
También hubo una versión con motores Mercedes-Benz, Schulz tenía buena relación con la marca a raíz del CW311. El Spyder pasa a llamarse 033.16 al equipar el 4 cilindros 185 CV del Mercedes 190E 2.3-16. En 1987, el Spyder pasa a llamarse 036i al recibir el 6 cilindros Mercedes de 188 CV. En 1991, equipaba el nuevo 6 cilindros Mercedes de 3 litros con culata multiválvula.
En 1983, Schulz trabajaba sobre un proyecto de Opel Cabrio que no le motivaba, prefería trabajar en su nuevo proyecto, el Imperator 108i. Es decir, CW311 con algunas modificaciones estéticas y una batalla alargada en 8 cm con respecto al CW311.
Presentado en 1984, empezó a fabricarse en 1985. Se mantuvo en producción hasta 1991, oficialmente, pero hasta 2001 siguió aceptando pedidos. Se fabricaron una veintena de unidades en total, con diferentes variaciones y motores, desde un V8 Mercedes de 5 litros y 235 CV hasta un V8 AMG de 6 litros y 420 CV.
Isdera Commendatore 112i. Objetivo: Le Mans
En 1991, Isdera se lanza en la creación del sustituto del Imperator. Presentado en 1993, Schulz bautiza el coche Commendatore, en homenaje a Enzo Ferrari, apodado “Commendatore” y fallecido hacía poco. Dejando atrás las formas rectilíneas del los 80 de sus anteriores producciones, Schulz traza un auténtico Grupo C de formas suaves y orgánicas adaptado a la calle.
Con 4,66 m de largo, 1,88 m de ancho y tan sólo 1,04 m de alto es una bestia imponente. Las puertas en alas de gaviota dejan ver un cockpit de Grupo C recubierto de cuero, mientras que los dos capós traseros en alas de gaviota (sí, también) dejan ver un V12 Mercedes de 620 CV asociado a un cambio Getrag de 6 marchas.
Se trata del V12 M120 de 6.0 litros de la marca de la estrella. Este motor, en su versión AMG, se haría más tarde un hueco en el Pagani Zonda en diferentes versiones, de 406 a 800 CV.
Sus prestaciones estaban a la altura de su aspecto con una velocidad máxima de 370 km/h y un 0 a 100 km/h en 4 segundos. Cabe destacar que fue uno de los primeros coches en utilizar un aerofreno. El alerón trasero se levantaba en un ángulo de 80 grados en las fuertes frenadas para ayudar al sistema Brembo.
Isdera tenía la intención de llevar el coche a las 24 Horas de Le Mans. Sin embargo, la crisis económica que golpeó Japón, de donde provenía su financiación, terminó con los fondos para el desarrollo de Commendatore.
Finalmente la competencia de las grandes marcas, como Porsche y Ferrari, así como la llegada del McLaren F1 terminaron enterar el proyecto Commendatore. Isdera no podía seguir el nivel de inversión que requería un proyecto de esa magnitud. Sólo se fabricó una unidad, el prototipo.
Posteriormente, el Commendatore fue vendido en 1999 a un coleccionista suizo, que aportó algunas modificaciones. Se deshizo de las llantas BBS y montó unas Azev de 18 pulgadas delante y 20 pulgadas detrás. Eliminó también el retrovisor periscopio e instaló dos retrovisores convencionales en las puertas. Su intención era lanzar una producción en serie limitada tras presentarlo en el Salón de Ginebra bajo el nombre de “Silver Arrow”. Ésta nunca se materializó y lo vendió de nuevo en 2005 a un alemán.
Finalmente, en 2016, Isdera volvió a comprar el coche y lo ha devuelto a su especificación original. A principios de enero, la propia Isdera venderá su coche en un subasta en París organizada por RM Sotheby’s. Y es que Isdera sigue en activo. En 2018, presentó en el Salón de Beijing el Commendatore GT, un deportivo eléctrico con puertas alas de gaviota.
Fotos | Isdera & Rémi Dargegen © 2020 RM Sothebys
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