Según datos de la DGT, en 2020 35 peatones murieron y 198 fueron hospitalizados tras ser atropellados en un paso con semáforo. En 2019 (último sin pandemia), esas cifras fueron aún mayores: 47 fallecidos y 317 heridos hospitalizados.
Irónicamente, desde Tráfico se han hecho eco de una situación que solo ocurre en España: semáforos que tienen una fase en ámbar intermitente para vehículos coincidente con la verde para peatones,; una forma de mejorar el flujo de tráfico, pero que aumenta el riesgo de atropello.
Burgos y Alicante, en el punto de mira
La ONG británica Safer Roads Foundation ha señalado a España como el único país del mundo en el que aún hay semáforos que se muestran en ámbar para los vehículos y a la vez en verde para los peatones:
"Que un niño, siguiendo correctamente la instrucción de 'hombre verde' para cruzar, pueda morir debido al ámbar intermitente es tremendamente preocupante", han dicho desde la organización miembro del Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte.
Esta fundación británica observó en Reino Unido un tipo de semáforo denominado 'Pelican' con secuencia en ámbar parpadeante para los conductores que resultaba muy peligroso para los peatones.
Tras presentar las conclusiones de sus investigaciones al Departamento de Transporte, logró que se modificara la normativa, mostrando semáforos con cuenta regresiva para los peatones y formatos de secuencia rojo y verde.
En este sentido, creen que la solución para estos pasos es cruzar en dos etapas separadas y eliminar esa fase en ámbar, en la que muchos conductores reanudan la marcha cuando empieza a parpadear, a pesar de que la prioridad es de quienes van a pie.
safer roads foundation
En España se ha puesto el foco sobre dos puntos con este tipo de semáforos: la glorieta Jorge Luis Borges en Burgos y la Avenida de la Unión Europea en Benidorm, Alicante.
La consultora especializada en movilidad GEA21 señaló estas glorietas como un "riesgo continuado de accidente" y recomendando mantener el semáforo vehicular en rojo durante toda la fase verde peatonal.
¿Qué ha hecho la DGT?
Ante la advertencia de Ayuntamientos como el de Barcelona de que eliminar el ámbar afectará a la fluidez del tráfico, desde la DGT aseguran que ya se han planteado "recomendaciones" para mejorar la seguridad en estos pasos.
Por ejemplo, no usarlos en tramos fuera de intersecciones ni los que tienen giros a la derecha para los vehículos en vías con más de un carril. En estos casos, la fase verde de peatón debe coincidir con la roja para los vehículos.
Otra solución sería sustituir por contadores la fase verde intermitente para los peatones. Y si la demanda peatonal es inferior a 150 peatones/hora, lo aconsejable es habilitar semáforos con pulsador.
De momento Burgos ha eliminado la fase ámbar para vehículos en 10 intersecciones de la ciudad y está estudiando algunos puntos más, mientras que Barcelona (donde hay 3.000 y 4.000 cruces semaforizados con giro a la derecha, con fase verde para los peatones y ámbar para los vehículos) han sustituido la fase de ámbar intermitente para vehículos por otra roja en zonas más conflictivas, como entornos escolares.
Para Safer Roads Foundation, el peligro se abordaría simplemente reprogramando el controlador de señales para eliminar el confuso parpadeo ámbar para los conductores, con la secuencia convencional rojo/ámbar/verde operando las 24 horas del día, los 7 días de la semana.