El fabricante chino NIO ha empezado ha exigir a los propietarios de sus coches que realicen una prueba antes de activar por primera vez la función de conducción semiautónoma, llamada NIO Pilot y NOP (Navigation on Pilot).
Esta nueva medida de seguridad llega después de que se hayan producido dos accidentes mortales en menos de 15 días en China a bordo de un NIO EC6 y de un NIO ES8.
Un vídeo y 10 preguntas: ¿es suficiente?
Según explican desde cnevpost, NIO ha lanzado un vídeo de nada menos que seis minutos seguido por un cuestionario de 10 preguntas que el conductor deberá aprobar para poder activar el NOP.
Una vez contestadas correctamente, el usuario recibirá 200 créditos NIO a modo de recompensa.
En él se incide acerca de la necesidad de que el conductor mantenga en todo momento la atención plena a la carretera y recuerda que son funciones de conducción asistida, no conducción autónoma.
También explica cómo se activa, cómo cambiar de carril, establecer una velocidad predeterminada y en resumen, las limitaciones del sistema.
Pero este fabricante chino no es el único que ha empezado a 'poner a prueba' (si se puede llamar así) a sus clientes antes de usar su sistema de conducción semiautónoma.
Su competidor, XPeng, introdujo un sistema de exámenes en marzo de este año que requiere que los usuarios realicen una prueba antes de poder usar su tecnología.
De momento, y con la investigación en curso, los primeros datos no oficiales del accidente mortal a bordo de un NIO ES8 indican que el coche no frenó ante un obstáculo: aceleró bruscamente una vez y no se registró ninguna desaceleración de emergencia.
Por desgracia, al factor tecnológico de la conducción autónoma hay que añadir el factor humano.
Cada vez son más frecuentes las conductas negligentes a bordo de vehículos equipados con esta tecnología, como el conductor de aquel Li Xiang One, que activó el sistema de asistencia de conducción y luego hizo creer al vehículo que todavía estaba conduciendo con atención.
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