Uno de los principales atractivos del Valle de la Muerte, en EEUU, es que tiene el récord de ser el lugar del planeta con las temperaturas más altas del mundo, algo que por alguna razón atrae a más de un millón de turistas al año, de los cuales más de 200.000 van en los meses de verano a caminar durante kilómetros, correr (¡!) o cruzarlo en coche muchas veces de forma irresponsable.
En este mes de agosto el Servicio de Parques Nacionales está viendo un repunte de vehículos que acaban ardiendo debido a estas condiciones extremas, pero por una razón: los frenos no lo aguantan. Por eso muchos fabricantes vienen a este lugar a poner a prueba sus modelos.
Un escenario 'ideal' para testar vehículos
Según ha informado el Servicio de Parques Nacionales, el 15 de agosto, un camión de reparto de refrescos se incendió por completo en la carretera CA-190, cerca de las dunas de arena de Mesquite Flat. Por suerte el conductor no resultó herido, pero los bomberos creen que el incendio se originó por el sobrecalentamiento de los frenos.
Se trata del cuarto incendio de un vehículo de reparto en poco más de un mes en el que está activa la alerta por calor extremo, con temperaturas de hasta 54 grados. Y en la mayoría de los casos apuntan al sobrecalentamiento de los frenos durante pendientes pronunciadas, sobre todo en vehículos de grandes dimensiones. Se trata del 'fading'. Cuando abusamos de los frenos, por ejemplo porque circulamos por una carretera con muchas curvas, descendemos por pendientes pronunciadas sin aprovechar el efecto del freno motor, o simplemente cuando llevamos el coche muy cargado, además del líquido de frenos, se sobrecalientan las pastillas.
El abrasador Valle de la Muerte tiene una superficie de 7.800 kilómetros cuadrados y presenta desafiantes cambios de calor y elevación. Su temperatura récord de 57,5 grados, registrada en 1913, es superada sólo por El Azizia, un desierto en Libia, que supuestamente alcanzó los 57,5 grados en 1922. Debido a las altas montañas que bordean el valle, el aire desciende por las laderas y se comprime y calienta a medida que lo hace. Como resultado, las temperaturas del aire se vuelven cada vez más altas, pero supone un escenario ideal para que los fabricantes pongan a prueba sus vehículos (habiendo solicitado los permisos pertinentes más un pago de 300 dólares).
Estas rutas no solo permiten realizar pruebas de límite del mundo real del sistema de enfriamiento del vehículo, sino que también ponen a prueba los sistemas de diagnóstico a bordo y de gestión del motor a través de los cambios de altitud, perfectos para poner a prueba el sistema de frenado, determinar las temperaturas de los frenos y del líquido de frenos.
Y este cima extremo irá a más. "El Valle de la Muerte, en California, registró una temperatura media mensual récord de 42,5 °C, posiblemente un nuevo récord observado en cualquier parte del mundo. Incluso las remotas capas de hielo congeladas de la Antártida han estado sintiendo el calor", relata la Secretaria General de la Organización Mundial de Meteorología, Celeste Saulo.
Por ello recomiendan "viajar preparado para sobrevivir, pues los móviles allí no funcionan". Hace tan solo unas semanas un hombre de 57 años murió tras un accidente en su coche debido a las altísimas temperaturas. Es la segunda muerte este verano.
Foto | Servicio de Parques Nacionales
