Cuesta afirmar que el balance es positivo cuando 54 personas han perdido la vida y 14 han resultado heridas graves durante estas vacaciones, y la operación especial no se ha cerrado todavía.
Pero comparándolo con el mismo periodo del año pasado, se ha reducido la cifra de muertos en 44 personas respecto al mismo periodo de 2007, un dato positivo pero que no debe hacer que bajemos la guardia.
El pasado año un 27% de los fallecidos en accidentes de tráfico durante Semana Santa no llevaba puesto el cinturón, cifra que se elevó al 45% en 2006. La cifra de velocidad excesiva supuso un 38% el pasado año.
Viendo estos factores, y aunque aún es pronto para sacar conclusiones, puede que sean dos de los que hayan influido en la reducción de accidentes, además de otros no controlables como el escalonamiento de las salidas, el clima o el número de desplazamientos.
Resumiendo, podemos felicitarnos durante unos momentos pero sin bajar la guardia, 44 personas (o las que sean en la cifra final) siguen siendo demasiadas.
Vía | El País