Las tres empresas de patinetes que operan en Madrid, Vol, Wind y Lime, acaban de recibir un ultimátum por parte del consistorio, y según informa eldiario.es se les ha suspendido la autorización para operar: tienen 72 horas para retirar los patinetes de las calles madrileñas.
Y es que el primer atropello mortal a un peatón con un patinete (ocurrió el agosto pero ha trascendido ahora) ha puesto en evidencia la falta de una regulación unificada. En Madrid, el Ayuntamiento se ha reunido con nada menos que 15 empresas interesadas en desplegar sus flotas de patinetes, que se sumarían a las tres que ya operan en la capital.
La seguridad vial y peatonal, las razones de esta decisión (que no es irreversible)
La decisión de 'echar' de las calles de Madrid a estas tres empresas que ya estaban operando responde al cumplimiento de la normativa de circulación. Según fuentes del área de desarrollo urbano sostenible, estas empresas no instan a sus usuarios a través de sus app a respetar las zonas en las que tienen prohibida la circulación.
Primera start-up de sharing de patinete electrico que veo en Barcelona. Localización: Rambla Catalunya, empresa Wind. pic.twitter.com/H7GvwgXglZ
— Gabriel Colominas (@GabrielCoBi) 29 de agosto de 2018
"El Ayuntamiento exige que se excluyan aquellas zonas donde, conforme a la Ordenanza de Movilidad Sostenible, no sería posible la utilización del patinete eléctrico, como calles y espacios peatonales o grandes glorietas donde confluyen vías de múltiples carriles y con velocidad de 50 km/h máximo. Ninguna de las tres empresas había fijado en su app las zonas donde sus clientes pueden empezar y acabar los viajes", recoge el diario.es.
Así, las tres compañías han recibido esta mañana la ordenanza de retirar todos sus patinetes en un máximo de 72 horas, hasta que fijen adecuadamente dónde pueden sus clientes comenzar y acabar los viajes. El Ayuntamiento trata de esta forma de regular el uso de estos Vehículos de Movilidad Personal, de forma que haya un reparto equilibrado y se evite la saturación de algunas zonas.
Recordemos que el Reglamento de Vehículos aún no recoge a los patinetes eléctricos como un vehículo, por lo que no se puede aplicar ningún delito contra la seguridad vial si tuviera lugar otro atropello.
Por otro lado, a estas empresas se les exige que compartan datos de geolocalización de sus vehículos para controlar estas flotas, y la estadounidense Lime no ha entregado a tiempo la documentación requerida. Sin embargo, no se trata de una decisión inamovible: las tres empresas afectadas podrán volver a pedir una autorización una vez cumplan con la normativa.
